Tres personas han sido detenidas en Granada por la Policía Nacional. Dos hombres senegaleses y una mujer española, de entre los 35 y los 41 años, han fingido para que uno de los migrantes pudiera obtener la residencia legal. Por ello, son presuntos responsables de los delitos de falsedad y favorecimiento a la inmigración ilegal
La mujer y uno de ellos se hicieron pasar por pareja de hecho e iniciaron los trámites. Agentes de la Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales de Granada recibieron cierta información por parte de la Oficina de Extranjeros de la Subdelegación del Gobierno de Granada donde se había presentado una documentación en la que un varón solicitaba la residencia legal en el país. Estaba motivada por una relación afectiva con una mujer española con la que se había inscrito como pareja de hecho registrada.
Según la Policía, los agentes analizaron los documentos aportados por el ciudadano de Senegal que figuraba empadronado en el domicilio de la mujer situado en Maracena, ambos con antecedentes policiales. En dicho lugar también figuraba otro varón extranjero sin antecedentes policiales. También comprobaron que el ciudadano que solicitaba la residencia como cónyuge o asimilado de una española, había solicitado otra residencia anterior como pareja registrada de otra española, trámite que le fue denegado tras comprobar la inexistencia de relación o convivencia entre ambos.
También había una incongruencia entre las documentaciones presentadas para ambos trámites, tanto para inscribirse como pareja de hecho registrada, como al solicitar autorización de residencia por arraigo familiar, ya que el peticionario aparecía en unos como casado y en los más antiguos como soltero.
Todo ello motivó situar el foco de la investigación sobre la supuesta pareja afectiva, la mujer que además convive con otro hombre del mismo origen que el del varón que pretendía regularizarse. Durante las pesquisas, los agentes determinaron que se trataba de una instrumentalización de trámites administrativos orquestados para la obtención del permiso legal de residencia en el país.
Los investigadores apuntan a que habría sido la pareja real de la mujer quien le habría propuesto que hiciera los trámites falsos para que su amigo pudiera regularizarse de modo ilegal. Ya en sede policial, la española reconoció haber simulado ser la pareja registrada del amigo de su pareja.
El trámite se ha resuelto de modo desfavorable al descubrirse la conveniencia de la falsa relación afectiva. Una vez finalizadas las diligencias policiales, los tres investigados quedaron en libertad y se encuentran a la espera de ser citados por la autoridad judicial.