Francisco Ponce de León, apodado El Caribe, encargó su construcción, en pleno arrabal de San Miguel, hace casi 400 años en plena Cruz Vieja. De hecho, el inmueble data de 1646 y es uno de los pocos vestigios de la arquitectura civil del siglo XVII en el casco histórico de Jerez, a los pies del monumento dedicado a Lola Flores. En diciembre de 2016 la Junta de Andalucía anunció su rehabilitación para destinar la finca a pisos en alquiler para rentas bajas. Pero el proyecto se abandonó en 2019.
Tres años después de aquel abandono de las obras, el nuevo Gobierno andaluz está a punto de rematar un proyecto de vivienda pública en pleno corazón de la ciudad. A tres meses del final de obra de rehabilitación de la casa palacio sita en la calle Ramón de Cala número 7, que está siendo rehabilitada por la Junta de Andalucía para adaptar en ella 22 viviendas de alquiler, la delegada territorial de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda en Cádiz, Carmen Sánchez, ha girado visita a las obras para comprobar su estado de ejecución.
La delegada territorial, acompañada por el director en funciones de AVRA en Cádiz, Juan Jesus Bernal, ha conocido la rehabilitación integral que se ejecuta sobre el inmueble que ocupa la finca delimitada por las calles Ramón de Cala y Cazón, comprobando in situ el ritmo de los trabajos para la recuperación del interior del inmueble y la adaptación de 22 viviendas, que se adjudicarán en régimen de alquiler.
Casi 600.000 euros para rematar las obras de rehabilitación del palacio de la Cruz Vieja
La actuación en este inmueble se reanudó el pasado mes de agosto después de un período de inactividad a consecuencia del abandono de las obras por parte de la primera empresa adjudicataria. Ello obligó a la rescisión del contrato y a una nueva tramitación para terminar los trabajos pendientes, por valor de 577.366 euros.
En la actualidad, las obras se ejecutan a buen ritmo y se prevé su terminación para el mes de febrero de 2023, fecha en la que volverán al inmueble siete familias originarias que se encuentran ahora realojadas en otras viviendas, y 15 nuevos inquilinos procedentes del Registro Municipal de Demandantes de Vivienda de Jerez y que han sido propuestos como adjudicatarios por el Ayuntamiento.
En su visita, la delegada de Fomento ha destacado la importancia de la intervención “una actuación que se ha reanudado después de tres años de abandono por la empresa adjudicataria y tras superar una compleja tramitación para volver a licitar los trabajos pendientes y cuya terminación tiene un horizonte próximo”, ha indicado.
Carmen Sánchez ha reiterado la importancia de la rehabilitación que se ejecuta, “por cuanto supone la recuperación de un edificio que constituye el único vestigio de la arquitectura civil del siglo XVII en el casco histórico de Jerez y que compatibilizará su valor patrimonial con el uso social al que se destinará como edificio de viviendas públicas en régimen de alquiler para familias con recursos limitados”.
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