La Hermandad del Rocío de Jerez cumplió un año más con la tradición de poner rumbo a la aldea de El Rocío en un inicio de romería que no se salió de lo habitual. La misa de romeros en Santo Domingo dio paso a la colocación del simpecado en la carreta y desde ese momento se puso en marcha la comitiva para llevar a cabo la liturgia de salir de la ciudad, con momentos clásicos como la parada en la Escuela de San José para recibir el homenaje de los alumnos, parar ante la Soledad en la Victoria, rezar ante la Virgen de Lourdes en la gruta del Calvario, entrar en el santuario de San Juan Grande y adentrarse en la carretera que lleva hasta Sanlúcar. Todo sucedió en una mañana luminosa y algo fresca, ideal para afrontar lo que les queda por delante.
Esos primeros momentos de romería se desarrollaron sin las bullas que concurren en otras salidas de otras hermandades en otras ciudades y pueblos. Como es habitual fue tranquila, pero sin que faltara el arrope de los rocieros en torno a la carreta de plata. Caballistas y banderín de camino abrieron la marcha junto a los oficiales de la hermandad y el alcalde de carretas, precediendo a los quince carros que este año conforman la comitiva. A esta cita no faltaron las flores de las jacarandas cuyo color morado, que es el mismo que el de la hermandad de Jerez, cubrió el gran tramo de la Porvera, donde sus largas ramas cubrían un cielo celeste.
Cabe recordar que la de Jerez es la única hermandad de la provincia que lleva el colorido complemento de las carretas tiradas por mulos y cada una de ellas adornada con flores de papel de variado colorido. Esta estampa, singular y preciosa, solo la ofrece Jerez. Y además este 2024 se cumplen 50 años de la presencia de estos vehículos de tracción animal, a lo se suma otra efeméride no menos destacada, medio siglo de camino por Doñana.
El guion de esta jornada, un tanto apática por aquello de tener que recorrer gran parte del trazado por carretera, cumplió con el primer Ángelus de la peregrinación, en el cortijo de El Barroso, donde tras el rezo y los preceptivos vivas se tomó el primer y obligado refrigerio; gran parte de la tracción mecánica, por recomendación de la Guardia Civil, avanzó hasta Sanlúcar. Mientras, el resto buscó la explanada de Ventosilla para, a primera hora de la tarde, hacer la parada de almuerzo.
En datos, la hermandad jerezana crece en sus números. El cálculo de personas que van con ella llega a las 2.300, una cifra oficial y es la que manejan los servicios de asistencia del Plan Romero. En cuanto a las cifras, el hermano mayor destacó a este medio, apoyando el dato de una mayor participación, que después de 12 años ha habido que hacer una baremación entre las muchas peticiones que se han recibido para alquilar habitaciones en la casa de Jerez en El Rocío por parte de los hermanos. Lo excepcional es que cada Rocío no se llega a hacer este filtrado, ya que ha habido habitaciones suficientes para cubrir la demanda.
Por cierto que la hermandad está levantando seis nuevos cuartos en el patio de carretas, que serán para 2025. También ha subido el número de carros que irán tras el del simpecado, 15 más el del propio simpecado. En cuanto a vehículos de tracción mecánica, son unos 230, algo más que en años precedentes, y unos 300 caballos, cifra igualmente superior.
Comentarios