Antonio Montero ha renunciado a su acta de concejal del PP de Jerez en el Ayuntamiento. La comunicación se ha producido públicamente, por el propio Montero, en el pleno ordinario de noviembre que tiene lugar este jueves en el Consistorio jerezano. El edil popular, que fue concejal responsable de Cultura en el anterior gobierno de María José García-Pelayo, llevaba más de un año sin acudir a las sesiones tras sus desavenencias con Antonio Saldaña, actual líder y portavoz de la formación en Jerez.
Fue Saldaña quien le apeó de la portavocía municipal tras su incidente por conducción bajo los efectos del alcohol. El partido en Cádiz forzó a Saldaña a dimitir de todos sus cargos, pero finalmente la intervención de Génova dieron marcha atrás a la decisión. En todo caso, la entonces presidenta del partido en la provincia, Ana Mestre, obligó a Saldaña a dejar la portavocía de Diputación de Cádiz, lo que le dejaba sin liberación, al estar ocupados los puestos en Jerez, entre ellos la portavocía municipal, que tras muchas peleas internas recayó en el propio Montero.
Tras la insistencia de Saldaña, pese a la negativa de Montero, dobló la mano y acabó arrebatándole el puesto. Desde entonces, el ya exconcejal se mantuvo ajeno a la polémica, regresó a su puesto de trabajo y dejó la primera línea política.
"El tiempo pone a todo el mundo en su sitio", ha dicho Montero públicamente, quien incluso ha citado a San Agustín para argumentar su tiempo de silencio y su marcha final del pleno. "Debía ser paciente, porque la paciencia es el compañero de la sabiduría". La renuncia llega tras "una larga travesía reflexionado, meditando y madurando la decisión".
En declaraciones a lavozdelsur.es, Montero, que ha sido llamado por el partido tras anunciar su dimisión, ha asegurado que "con el partido está todo genial, esto es una puerta que se cierra, pero pueden abrirse otras. Yo lo tenía más que asumido todo esto porque era incompatible seguir, pero hemos tenido la pandemia y no ha sido fácil concretar la decisión: Yo no había hecho nada, pero me he quitado un peso de encima porque no estaba actuando bien, no puedo estar sentado en mi casa, dando la espalda a quienes nos votaron, yo tenía que estar bien yo mismo y tranquilo conmigo mismo, y este lastre tenía que soltarlo".
Montero ha reconocido que seguir "era muy difícil con una persona como Antonio, que no digo que sea malo, pero no actuó bien ni hizo las cosas bien, por lo que ya determinadas cosas no tenían sentido, por lo que creo que he dado el paso más acertado". Sobre el hecho de que finalmente, como se ha dicho desde aquella tarde, haya acabado pagando las copas de Saldaña, Montero ha asegurado que esto "en un trabajo privado no pasa, y aquí pasa, pero bueno, la vida es muy bonita y muy larga, y allá cada uno con su conciencia. Yo no vivo de esto, tengo mi trabajo, no ganaba más dinero en política, no ha sido esa la cuestión, y ahora no me planteo nada, el tiempo pondrá a cada uno en su sitio".