La empresa concesionaria, que ya trabajó con Pelayo en la Alcaldía en 2014, mejoró en 115 euros por evento el tipo mínimo que exigía el contrato negociado sin publicidad.
Al Partido Popular no le convencen las explicaciones vertidas por el teniente de alcaldesa de Urbanismo, Patrimonio, Dinamización Cultural y Seguridad, Francisco Camas, a raíz de su denuncia sobre el proceso seguido para contratar el servicio de ambigú durante los 19 conciertos de verano en el Alcázar de Jerez, dentro de los ciclos 'Noches de Bohemia' y 'Viernes Flamencos'. "No se ha dado ninguna explicación en relación a este asunto, se han limitado a decir que todo es correcto, pero tienen que dar muchas explicaciones de cómo se ha adjudicado este contrato, quién está detrás del mismo y las relaciones entre políticos y empresarios del PSOE", han sostenido en una nota de prensa.
De entrada, el perfil del contratante de la web del Ayuntamiento de Jerez recoge que esta adjudicación se ha tramitado mediante un procedimiento negociado sin publicidad y cuya aprobación tuvo lugar por resolución del propio Camas el pasado 22 de junio. Algo inusual, ya que generalmente este tipo de contrataciones pasan por el filtro de la junta de gobierno local. Dicha formalización del contrato, por cierto, no se hizo pública en el perfil del contratante hasta 28 días después de llevarse a cabo, lo que ha aumentado las sospechas del principal grupo de la oposición en el Consistorio jerezano.
Fue el 1 de julio cuando se firma esta resolución por la que se adjudica a la empresa Generaliz SL el servicio de bar en el Alcázar a cambio de un canon de 415 por noche (IVA no incluido), una oferta 115 euros superior que el mínimo que fija el procedimiento. En total, el ambigú supone un canon de 7.885 por 19 noches para una estimación de beneficios, según ha podido saber este medio, de unos 2-3.000 euros. El PP ha denunciado la vinculación de esta sociedad con el PSOE, llegando a calificarla incluso como "empresa pantalla", si bien este medio ha podido saber que bajo mandato de la exalcaldesa García-Pelayo, también prestó sus servicios para el Ayuntamiento de Jerez. Su socia única es la esposa del ex concejal socialista durante el pasado mandato Abraham Granadino, que ocupó la vacante que dejó la secretaria general socialista en Jerez, Miriam Alconchel, al marcharse a la Junta.
Según denuncian los populares, el Registro Mercantil de Cádiz recoge que las últimas cuentas presentadas por esta empresa son las del año 2013. En este sentido, han expuesto en el citado comunicado de prensa que “la Ley de Contratos del Sector Público y el propio pliego del negociado sin publicidad contempla que para que una sociedad sea adjudicataria de un servicio es necesario que acredite su capacidad, solvencia económica y experiencia para contratar, y las cuentas anuales son fundamentales para acreditar esta capacidad para contratar". Este hecho tampoco es significativo si se tiene en cuenta que el PP también contrató habitualmente en el anterior mandato con sociedades que llevaban una década sin actualizar sus cuentas. Desde los populares, en todo caso, solicitan a Mamen Sánchez y Francisco Camas que “hagan público y de forma transparente el expediente y toda la documentación aportada por la sociedad" del que ya han dado en llamar 'caso Bar del Alcázar'.