¿La fiesta más cara? A tenor de los costes que se manejan este año por montar una caseta en la Feria del Caballo puede decir que el regreso de la celebración va a salir por un pico a sus organizadores. La relación de gastos para los caseteros es larga, menos si son los titulares los que directamente lo asumen todo por amor al arte.
Hay que empezar con el pago de la tasa municipal, que se eleva a algo más de 2.500 euros por dos módulos, sin que haya experimentado subida. Esta cantidad suele asumirla tradicionalmente la bodega cuyos vinos sean exclusivos en la caseta. En estos casos, cada vez menos, la bodega cierra un acuerdo con el casetero por el que este se obliga a vender o más bien comprar un mínimo de 70 cajas de medias botellas de fino —24 unidades por caja—, que se consuman o no deben pagarse a la firma vinatera. Si se trata de un vino de una marca reconocida, el precio es de unos 6.000 euros.
El pago de electricidad, que lo tramita el Ayuntamiento, es otro aspecto que subirá de forma brutal en este mayo de 2022. En 2019 se pagaban unos 500 euros por dos módulos; ahora este recibo subirá hasta los 700 euros, aproximadamente, a lo que hay que sumar el trabajo del instalador autorizado, la emisión del certificado y el boletín de enganche, que se eleva a unos 500 euros más.
El agua puede rondar los 220 euros, pudiendo subir algo por el IVA. Todo estos precios deben abonarse antes del inicio de la Feria, además de otros conceptos esenciales como instalar el suelo de madera, que se alquila al precio de 800 euros; la instalación de servicios químicos, obligatorios dos unidades en casetas de dos módulos, 350 euros; los seguros obligatorios que pueden sumar más de 200 euros.
En ese presupuesto hay conceptos variables, es decir, la pintura de la fachada e interior, material para reparación y decoración; todo esto siempre y cuando la fachada, guardada desde hace dos años, encaje en medidas con la de los módulos de la nueva empresa adjudicataria cuyas dimensiones varían a las del anterior instalador, Los Puitos. De ser así, construir una nueva portada puede elevar la cifra entre 5.000 y 6.000 euros más. El capítulo cocina es otro tajo gordo del presupuesto. Para adecuarlas a las medidas de seguridad y las higiénico sanitarias exigidas, precisa una imnportante inversión en elementos como agua caliente y fría, grifos especiales, maquinas para el frío, conservación de alimentos, suelo especial, y un largo etcétera.
Así las cosas, montar una caseta de feria, siempre que la mano de obra la aporten desinteresadamente los integrantes de hermandades, peñas u otros colectivos diversos, debe contar con un saldo de inicio para la caja de -15.000 euros más o menos, cantidad que hay que amortizar y superar en los días de celebración. Si la instalación la llevan a cabo empleados a sueldo, a todo lo anterior hay que añadir el valor del trabajo, que suele ser contratado a cuadrillas especializadas por parte de negocios de restauración o cáterings.
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