Con la guitarra a cuesta toda la Feria
José Ángel Lupión es una de las voces festeras de la Feria del Caballo. Él, su guitarra y su grupo forman parte de la animación de las casetas, como otros muchos grupos que echan una Feria diferente. En las que son contratadas, cantan sevillanas, rumbas y todo lo que sea animar el ambiente. Lupi y su grupo trabajan todos los días, desde el mediodía hasta la noche. No les falta trabajo. Están overbooking. Y cuando acabe todo el sábado, llegará su momento más deseado: la romería del Rocío, de la que este año ha sido su pregonero.
¿Cómo se vive una Feria de actuación en actuación en las casetas?
Los que por suerte trabajamos vamos de un lado para otro siempre corriendo porque tenemos pases; no obstante lo disfrutamos a nuestra manera porque nos gusta. Los amigos vienen a vernos, siempre estamos rodeados de ellos.
¿La gente os busca?
Claro que sí. Tenemos nuestra comitiva que siempre nos acompaña y disfrutan del ratito que echamos en cada caseta.
¿Compensa echar una Feria cantando?
Siempre compensa todo lo que sea trabajo. Sí es cierto que trabajar en el Real no siempre está bien pagado para lo que supone este esfuerzo. Los tiempos mandan y tenemos que adaptarnos.
Después de dos años sin Feria, ¿tenéis completo todos los días?
Gracias a Dios, este año sí. Nos ha quedado un hueco que ya está cubierto. O sea que de sábado a sábado, estamos a pleno rendimiento.
¿Qué es lo que más os demanda la gente cuando subís al escenario de la caseta?
Sobre todo sevillanas, que es lo habitual, pero el rumbeo se lleva cada vez más. Cuando bailan dos o tres sevillanas, ya se pide más marcha.
¿Le queda algún hueco para disfrutar de la Feria?
Solo un día y para almorzar con la familia. El resto de la celebración estamos en lo que estamos, de caseta en caseta y con la guitarra a cuesta desde mediodía hasta la noche.
Es una Feria muy diferente.
Así es. Es de trabajo, pero de un trabajo ameno y divertido; haces algo que te gusta y que me encanta, con mi guitarra y la disfrutamos a nuestra manera. No es lo mismo que no tener obligaciones de ningún tipo
Y después de la Feria, el Rocío que es lo que realmente disfruta.
No ponemos en modo Rocío cuando esto acaba. Solo miramos las arenas pero antes hay que preparar los avíos: coches, viandas y todo lo necesario para echarnos al camino.
Un Rocío diferente por haber sido el pregonero del Rocío el pasado sábado, con gran aceptación por cierto.
Fue una satisfacción poner la bodega La Concha en pie y engrandecer a la Virgen del Rocío.
¿Acabó contento?
Muy contento. Fue un pregón como yo pretendía: ameno, divertido, momentos de sentimiento, de intimidad y con la perspectiva de que la gente sintiera y se metiera en el pregón. Creo que lo conseguí.
El pregón fue mucho de usted y su personalidad
Fue el pregón de Lupi a pleno rendimiento. Eso me han dicho todos.
¿Deseando que termine la Feria para meterse, como dice, en modo Rocío?
Mis miras están puestas en el Rocío por eso deseo que pase la Feria. Esto no quita que desee que la gente disfrute de la celebración a tope. Que todo el mundo gaste dinero, que se gane dinero; que la Feria vaya bien es bueno para todos.