Cientos de jóvenes participan en una histórica manifestación por la vivienda en Jerez

La primera movilización sobre el problema habitacional en la ciudad discurre desde el centro urbano de Jerez al Minotauro convocada por la asamblea de Jerez por la Vivienda

La multitudinaria manifestación por el derecho a una vivienda digna en Jerez a su paso por la calle Larga.

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Jornada histórica en Jerez por la masiva movilización que ha organizado en el centro urbano de la ciudad la asamblea de Jerez por la Vivienda, un colectivo constituido este verano a raíz de las reivindicaciones por una vivienda digna que han tenido lugar en otras ciudades españolas y andaluzas.

La manifestación, con el lema Jerez para vivir, está enmarcada dentro de las movilizaciones por el derecho a la vivienda que comenzaron el pasado mes en Madrid, hace dos semanas en Sevilla, Málaga y Cádiz, y este mismo 23 de noviembre en Barcelona y Burgos. La convocatoria comenzó a las 12:00 horas en la plaza del Arenal, donde se congregaron centenares de personas —algunas fuentes apuntan a más de 1.000 asistentes—, con una importante asistencia de jóvenes, y presencia de representantes de varios partidos políticos, como el parlamentario andaluz y portavoz de Adelante Andalucía, José Ignacio García, la concejala de Ganemos Jerez Kika González, la coordinadora local de IU Violeta Márquez y miembros del círculo de Podemos en la ciudad, entre otros. 

Ante los medios de comunicación, Alberto Rodríguez, portavoz de Jerez por la Vivienda, ha explicado los motivos de constitución del colectivo. "Queremos evitar esperar hasta que llegue a un punto de no retorno como están las cosas en Málaga o en Cádiz, que son ciudades que son prácticamente muertas", dice el activista, que advierte que "aún así en Jerez la cosa está muy complicada". "Hay muchísimos edificios que se han ido vendiendo y solamente se renuevan para hacer apartamentos turísticos y viviendas turísticas, creemos que hay que hacer algo, la ciudad está empezando a sufrir y la gente no puede vivir, no puede encontrar un alquiler por lo que tenemos que salir a la calle y luchar junto al resto de ciudades del Estado que protestan por la situación actual", explica.

Activistas y asistentes a la manifestación convocada por la Asamblea por la Vivienda.  MANU GARCÍA

En esa línea, explica que Jerez "siempre ha sido una ciudad en el que lo precios no eran tan altos", una situación que está cambiando, con un incremento del 15% en el precio del alquiler el último año. "Se nota la ola de especulación que nos viene y además es que no hay pisos para alquiler", lamenta. 

"Los propietarios nos están expulsando de sus casas"

Uno de los jóvenes participantes en la asamblea explica a lavozdelsur.es que se manifiestan por un derecho recogido en la Constitución. "Los propietarios nos están expulsando de sus casas, cada vez los pisos están concentrados en manos de menos personas. En Jerez no está la situación tan difícil como en otra ciudades, pero con un sueldo como el mío, de 1.600 euros en la administración, es imposible no destinar casi la mitad de tu salario, con lo que ello conlleva, para no poder ir al dentista, montar una familia o tener una vida digna", denuncia.

Tras partir de la plaza del Arenal pasadas las doce del mediodía, la manifestación discurrió por calle Corredera y Porvenir para llegar a la zona de Madre de Dios, bordear el Minotauro y regresar por la calle Medina hasta Honda, Larga y de vuelta a Arenal, donde miembros de la asamblea convocante, Inma, Rocío y Alberto, leyeron un manifiesto donde explicaron los motivos de la movilización, a la que han tenido que ir "sin más remedio ante la dejación de las instituciones para exigir medidas contundentes", con alusión a la responsabilidad de todos los gobiernos —municipal, andaluz y estatal—, así como de los propietarios y rentistas, quienes consideran que está haciendo "negocio con un derecho universal y reconocido en la Constitución, como es el de la vivienda".

Alberto Rodríguez, portavoz de Jerez por la Vivienda, en declaraciones a lavozdelsur.es.

Entre las consignas de los manifestantes se ha podido escuchar "queremos vivir en nuestros barrios", "Pelayo, escucha, Jerez está en la lucha", en referencia a la alcaldesa de la ciudad, "Gobierno progresista, amigo del rentista", en clara alusión al Gobierno de coalición, "No llegamos a fin de mes. Si no bajan los precios, huelga de alquiler", "Ser casero no es un trabajo", o "Rentistas culpables, gobiernos responsables", una de las frases más sonadas del movimiento por la vivienda que desplegaron la semana pasada para llamar a la convocatoria en el partido del Xerez Deportivo Fútbol Club en colaboración con el grupo de animación del Kolectivo Sur, quien también ha acudido a la marcha. Además, la movilización contó con la presencia de varios integrantes del grupo de Teatro de Improvisación de Jerez, que realizaron una performance este jueves para animar a la asistencia.

"En los últimos 10 años, el precio del alquiler en Jerez ha subido un 65%, mientras que los salarios apenas han crecido un 3,5%. El acceso a la vivienda en este país y en nuestra ciudad se ha convertido en un imposible para gran parte de la población, que tiene que elegir entre pagar el alquiler o dar de comer a sus hijos. Solo el 15% de nuestras jóvenes pueden salir de casa de sus padres, y la media de edad con la que lo hacen es de 30 años, ni siquiera tener trabajo te garantiza tener un techo bajo el que poder vivir", dice el manifiesto leído por los miembros de Jerez por la Vivienda, que hacían referencia además a las personas migrantes, racializadas, mujeres, personas del colectivo LGTBI y discapacitadas, "colectivos más precarizados y vulnerables" ante esta situación. 

La crítica al gobierno local del PP en el manifiesto se hace extensiva al andaluz de Juanma Moreno, pero también a PSOE y Sumar a quienes consideran que "han aprobado leyes que se quedan cortas frente a la magnitud del problema y siguen priorizando los intereses del mercado y de la banca sobre los derechos de las personas". "Necesitamos una Ley de Vivienda que haga bajar los alquileres y que no dependa del gobierno autonómico de turno para ser aplicada, limitar las subidas ya no es una opción cuando los precios actuales son insostenibles", denuncian. 

Entre los objetivos señalaban que "Jerez se convierta en una ciiudad sin desahucios", que la vivienda "sea asequible para toda la gente" bajando los alquileres un 50% y "vincularlos a los ingresos de la clase trabajadora", "erradicar la especulación inmobiliaria" y hacer del turismo en Jerez un "turismo de convivencia que no expulse a vecinos y vecinas, que deje beneficios reales en la ciudadanía que son quienes crean riqueza y sea sostenible medioambeintalmente".

Galería de fotos | Multitudinaria manifestación por el derecho a una vivienda digna en Jerez

Multitudinaria manifestación por el derecho a una vivienda digna en Jerez.    MANU GARCÍA

El colectivo considera que "cada vivienda turística es una familia sin hogar" y reclama una tasa turística, declarar zona tensionada a Jerez, y "prohibir y eliminar las viviendas que se usan como Airbnb". Además, en el manifiesto se acordaron del "genocidio que Israel está cometiendo sobre Palestina y sus ataques en el Líbano" y los afectados por la reciente DANA de Valencia, con una referencia a la crisis climática. 

El próximo lunes 25 la asamblea Jerez por la Vivienda ha organizado una nueva asamblea en El Corral de San Antón a las 19:00 horas, donde han llamado a participar a los asistentes a la manifestación, que sentenciaron con el grito de "Ni casas sin gente, ni gente sin casa". 

Adelante Andalucía, Ganemos Jerez e IU, entre los asistentes

José Ignacio García, parlamentario y portavoz de Adelante Andalucía, en declaraciones a los medios de comunicación se ha hecho eco de los datos ofrecidos por la asamblea de Jerez por la Vivienda. "Son cifras que no se pueden aguantar, hay que recordar que en Andalucía en el año 2023 el 65% de las casas que se compraron se hicieron a tocateja, es decir, pagadas con una transferencia y no con un préstamo hipotecario. Toca preguntarnos quién está comprando esas casas", dice García, que apunta directamente a bancos, fondos de inversión y "gente muy rica" con objeto de especular con la vivienda.

Centenares de asistenten en la manifestaciónde 'Jerez para vivir'.    MANU GARCÍA

En esa línea, el diputado andaluz considera que "cualquier gobierno digno" debería "estar plantando cara" a esta situación. "Lo sufrimos más en Andalucía que en ningún sitio porque aquí los salarios son más bajos y estamos hartos, por eso desde el andalucismo de izquierdas tenemos claro que hay que estar en las movilizaciones". El portavoz local de la formación, Carlos Fernández, ha asegurado tras la movilización que espera que la alcaldesa de Jerez "rectifique su política de acceso a la vivienda". "El éxito de esta manifestación es un gran aviso para que Pelayo deje de instalar viviendas turísticas, ya que no solo no limita los precios del alquiler sino que fomentan la turistificación del centro de la ciudad", expresa Carlos Fernández.

IU, que ha contado con la asistencia de su coordinadora local Violeta Márquez, advierte de que "la imposibilidad del acceso a una vivienda digna es uno de los problemas más importantes que tiene que afrontar en la actualidad la clase trabajadora y, muy especialmente, la juventud". Así, expresa que hay que "intervenir desde lo público para que el derecho a vivir en la ciudad está garantizado, ya que el derecho de la vivienda no puede ser el negocio de unos pocos". "Es un problema complejo con muchas aristas, que viene de lejos y tiene una solución a corto plazo, hay que ponerse manos a la obra y no seguir ignorándolo; la turistificación, la acumulación de propiedades y la especulación inmobiliaria tiene consecuencias directas para la clase trabajadora", dice Márquez.

Por su parte, Ganemos Jerez, que ha contado con la presencia de su edil Kika González apuesta por un "cambio radical" para frenar la "emergencia habitacional", y ha anunciado que trasladará al pleno municipal de Jerez la "necesidad de sacar la vivienda del marco especulativo actual, exigiendo la regulación de un mercado descontrolado y desatado y una apuesta por la ampliación del parque público de vivienda.