El atropello ocurrido en Jerez la pasada medianoche del jueves al viernes, que se ha saldado con un fallecido, está siendo investigado por las autoridades, que ya levantaron atestado en el lugar de los hechos tras el aviso.
Si bien en un primer momento se informó de que el suceso había ocurrido en una calle de la barriada España, lo cierto es que tuvo lugar en la mediana de la avenida de La Paz, una de las principales arterias de la ciudad para el tráfico rodado, que conecta el entorno de la rotonda del Catavino y la estación de bomberos con la estación de trenes y la entrada al centro por la avenida de Arcos y la calle Medina.
Uno de los principales peligros de la avenida de La Paz es que hay peatones que a menudo cruzan libremente sin acudir a los pasos de peatones. Lo cierto es que esta vía tiene los pasos alejados entre sí y son además de espera por medio de botón para que el semáforo se ponga en rojo para los vehículos. Esto hace que algunas personas decidan cruzar por una avenida que, efectivamente, parece tener visibilidad porque no tiene curvas.
Sin embargo, esto resulta peligroso y una trampa, ya que la velocidad de la vía es de 50 km/h, y puede provocar que un despiste del peatón provoque un atropello. Más si cabe cuando la avenida tiene seis carriles, tres en cada sentido, y con una mediana con vegetación que sí impide la visión.
En este caso, según ha podido saber lavozdelsur.es, la primera línea de investigación de este atropello mortal es que fue la propia víctima la que cruzó indebidamente. Al tratarse de un accidente de máxima gravedad, el caso pasa a instrucción para investigar todos los detalles. Este periódico también ha podido confirmar que las pruebas de alcohol realizadas al conductor dieron negativo.
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