Las Flores, ante un Viernes de Dolores histórico: "Si pasa lo de la boda de Lolita, nos partimos la camisa"

Jerez se prepara para sumar, desde las 12 horas de este Viernes de Dolores, 31 de marzo de 2023, un nuevo atractivo cultural y turístico. La plaza Belén, que proyectó hace veinte años la fallida Ciudad del Flamenco, acogerá un espacio anhelado durante décadas.

Primero, por su protagonista, que nunca perdió el contacto con su tierra y ansiaba tener un museo en su ciudad natal. Y segundo, un proyecto largamente deseado por los gobernantes de la ciudad, que durante muchos mandatos intentaron sin éxito contar con un centro volcado en la intensa vida y la prolija obra de su vecina más universal: Dolores Flores Ruiz, Lola Flores, la artista universal que nació hace cien años en la jerezana calle Sol. 

Las hijas de la Faraona, Lolita y Rosario, guiadas por su representante, Mariola Orellana, han sido las encargadas desde llevar a buen puerto el nuevo intento del Ayuntamiento de Jerez, esta vez de la mano de la alcaldesa Mamen Sánchez, de que cristalizara el museo soñado: apenas “una casita con sus cosas —más de 200 piezas del patrimonio de Lola—, lo que nuestra madre habría querido”, como han reconocido. Dejando claro, al tiempo, que su casa natal apenas "habría dado para que entrasen cinco personas".

En cambio, la recoleta Nave del Aceite, un viejo molino del siglo XVII rehabilitado, no es que sea un hangar, pero sí contendrá más espacio para condensar la película de la vida y obra de Lola manteniendo cierto olor a su esencia. Se da la circunstancia de que la recuperación arquitectónica de este inmueble en la plaza Belén fue supervisada por el propio estudio de arquitectura de los suizos Herzog & De Meuron, que llegaron a Jerez para levantar la Ciudad del Flamenco y al final dejan como legado un edificio encalado con la icónica foto de Lola que inmortalizaron Saura y Storaro.

Desde este pasado miércoles Lolita y Rosario se encuentran en Jerez, “en shock” y “con el corazón encogido”, tras ver cómo está quedando el llamado Centro Cultura Lola Flores. Este jueves, rodeadas de una expectación mediática como no se recuerda en la ciudad —130 profesionales acreditados—, han comparecido en Los Apóstoles de González Byass, en la víspera del Viernes de Dolores, en lo que verdaderamente “será un día histórico”. 

Luego han vuelto, ya pasada la una y media de la tarde, a la Nave del Aceite, el inmueble rehabilitado que albergará la sede permanente de la colección con la memoria de Lola, su legado material, su patrimonio inmaterial… hasta el vestido de novia que llevó en su boda con Antonio González El Pescaílla, hasta con la presencia de su nieta Elena, hija de Lolita, que pone a la audioguía. Son algunos “spoilers”, como ha dicho la propia Lolita, del contenido de un museo “vivo”, y que quiere servir de “inspiración para otros artistas”, ha apostillado Rosario. 

“Lo hemos hecho (el museo) para el pueblo, para la gente, para la inspiración”, ha abundado. Y por supuesto, para los miles de incondicionales de Lola por todo el globo terráqueo. Precisamente la alcaldesa ha leído a viva voz el mail que había recibido esta misma mañana en la que una mujer de Argentina le anunciaba que llegará a Jerez con su familia exclusivamente para visitar el nuevo espacio dedicado a la Faraona y conocer a sus hijas. Una prueba innegable del tirón de esta “embajadora de España y Andalucía” en el mundo.

“No lo he visto entero, he visto un poquito porque todavía estamos terminándolo. Ya esta tarde va a estar casi todo terminado para mañana la inauguración. Pero es una cosa indescriptible”, han insistido ambas hermanas Flores ante la concurrida audiencia mediática. En todo caso, lo de este jueves ha sido un mero aperitivo del plato fuerte de mañana, cuando por fin se haga realidad y el centro abra sus puertas. 

Ante la enorme expectación despertada, Lolita y Rosario han respondido con todo el arte, a pregunta de lavozdelsur.es, qué ocurrirá si se desbordan las previsiones y se produce una reedición de aquel mítico momento del ‘si me queréis, irse’ de la boda de Lolita. “Como eso pasó en mi boda, si pasa, ya lo diré yo. Alejarse un poquito, no marcharse. Pero bueno, eso quiere decir que la gente va a tener mucha expectación para verlo y eso siempre es bueno”, ha replicado la propia Lolita. 

A lo que ha añadido Rosario: “Si pasa lo de la boda de Lolita, nos partimos todos la camisa”. Sobre todo, ha insistido la hija mayor de Lola, porque “en el sitio no cabemos todos, pero en la plaza se va a liar”.

Bromas aparte, Rosario ha confirmado que vienen muchos familiares, amigos y artistas invitados, y por supuesto estarán los nietos de la Faraona, salvo Elena —que se encuentra en el rodaje de una serie—, y su hermana Carmen Flores. "Para nosotros es muy importante que venga mi tía Carmen, que tiene 86 años, así que imagínate, vamos a tener que estar todos pendiente de ella para que no le dé un ataque porque va a ver toda su vida y las vivencias con su hermana. Es la parte con vida más de sangre de ella que tenemos. Y entonces bueno, pues en la familia estamos muy contentos y lo único que queremos es que el público esté tan contento como nosotros", han añadido, en vísperas de una jornada histórica en Jerez.