Polémica en Jerez por la instalación estos días de un Pasaje del Terror en el conjunto monumental del Alcázar. Fuentes del gobierno municipal han salido al paso de las críticas de PP y Cs por la utilización de este espacio y por la inversión que ha supuesto una atracción que, visto lo visto, ha contado con una gran acogida de público estos días previos a la noche de Halloween. De hecho, las colas que aguardaban en la tarde de este domingo para acceder al Pasaje del Terror eran de cientos y cientos de jóvenes y familias con menores expectantes por acceder al interior del recinto.
Desde el gobierno local, en declaraciones a lavozdelsur.es, han reiterado que el Alcázar está para "ser utilizado", por lo que "al igual que hemos autorizado un Pasaje del Terror también hemos firmado la autorización para que la Unión de Hermandades celebre próximamente el Vía Crucis".
Del mismo modo, han asegurado que "horas antes de la inauguración, se procedió a la revisión del montaje realizado por la empresa contratada para el mismo. En esa visita se decidieron varias modificaciones de algunos aspectos del montaje relacionados con el recorrido y la escenografía, entre ellas la eliminación de las dos figuras colgadas que desde el gobierno municipal no consideramos apropiadas ni mucho menos necesarias para el éxito de esta actividad".
"El Alcázar de Jerez es un recinto histórico que pertenece a todas las jerezanas y jerezanos y, por tanto, a las niñas, niños y jóvenes de esta ciudad. Refleja la diversidad religiosa y cultural que ha vivido nuestra ciudad en siglos", han aseverado estas fuentes municipales. En este sentido, "con el respeto a esta diversidad, el Ayuntamiento ha organizado la actividad de Halloween que ha dado la oportunidad a miles de ciudadanas y ciudadanos de conocer este recinto extraordinario y único en nuestro país. 1.300 visitantes el primer día, 2.300 visitantes el segundo y esperemos que hoy (por este domingo) que finaliza contemos con el mismo respaldo".
Del mismo modo, han señalado las mismas fuentes, "a lo largo de estas dos primeras jornadas hemos visto familias enteras aguantar largas filas para que sus niños y niñas disfruten la experiencia. Nuestra responsabilidad es ser sensibles y empáticos con los gustos de la ciudadanía y también con las nuevas tradiciones o festividades que se van consolidando".