La fundadora de Casa Pepa, el mítico establecimiento junto a la estación de trenes de Jerez, ha fallecido a los 84 años. “Preguntes a quien preguntes, la mayoría de gente conoce donde está mi restaurante y probablemente sea por el cariño y la humildad con la que tratamos a los clientes”, decía Pepa Bernabé a lavozdelsur.es en una entrevista el verano pasado.
A pesar de su edad y de problemas de movilidad, continuó durante muchos años acudiendo prácticamente a diario a Casa Pepa, manteniendo así el control de su negocio y recibiendo saludos cariñosos de muchos de sus clientes y amigos de toda la vida.
Además de las recetas culinarias, en Casa Pepa siempre ha destacado otra receta, la del trato cercano y caluroso que instauró la propia Pepa. “He ido a restaurantes donde el servicio es malísimo, la calidad de las comidas es regulín y el ambiente del equipo de trabajo deja mucho que desear. Aquí es distinto, el equipo de diez camareros hace que mi restaurante sea reconocido a nivel mundial”, presumía.
Precisamente, en la entrevista para lavozdelsur.es se enorgullecía de que hubieran pasado por sus mesas clientes de todas partes, que se llevaban a menudo antes de marcharse en tren o autobús un trocito de la tierra con el almuerzo de despedida. "Justamente la semana pasada", decía entonces, "tuvimos a una chica argentina que iba a coger el tren en la estación y estuvimos charlando mientras ella comía. Me contó que tenía mi restaurante anotado como una visita obligatoria antes de marcharse de Jerez. ¡No sabes la ilusión que me da saber que hay un trocito de Casa Pepa en muchas partes del mundo!".
Recientemente, el PP de Jerez registró una petición para que se le pusiera una calle con su nombre. “La oportunidad” de reconocer a “una mujer luchadora” como es Pepa Bernabé por todo el “esfuerzo y trabajo” a lo largo de toda una vida dedicada a la hostelería en Jerez.