La procesión Magna de Jerez, además de lo que en esencia es —pasos, bandas, organización y mucho más—, tiene una vertiente social que en cierto modo obliga al público, el local principalmente, a vestir galas ‘cofrades’. De una parte están los hermanos que formarán parte de los cortejos, 35 hermanos como máximo ante cada paso, así como el público en general que preferirá acompañar tan magno acontecimiento acoplándose con sus mejores trajes y también ellas.
Un comercio de textil en Jerez se ha acordado de esto y propone un “ofertón cofrade”. Así lo proclama la promoción que ha lanzado José Ángel Lupión, que está al frente Lupi, moda de caballero, un establecimiento que abrió hace nueve años. “Tenemos la procesión Magna Mariana a la vuelta de la esquina”, advierte en su publicidad. La oferta consiste en traje y corbata negra, camisa blanca y cinturón o tirantes. Todo por 165 euros.
“Ante la cercanía de la magna, pensando en los cofrades que acompañarán a sus titulares, estos tendrán que vestir de negro como corresponde a un acontecimiento así”, explica a lavozdelsur.es José Ángel Lupión, que espera que la iniciativa “tenga salida, estoy difundiéndola especialmente entre las hermandades”.
Insiste es que la idea le surgió cuando echó las cuentas y calculó que cerca de 1.300 cofrades formarán parte de los cortejos, que no vestirán la túnica y que por tanto “puede que muchos no tengan un terno adecuado para tal ocasión”.
Lupión es cofrade, además profesor de guitarra y muy conocido en los ambientes flamencos y rocieros, habiendo protagonizado espectáculos dedicados a este mundo, del que ha sido pregonero de la romería. “En Semana Santa sabemos que solo los capataces salen de negro, pero en este caso los hermanos en los cortejos vestirán de particular, siendo una oportunidad de poderlo ofrecer”, precisa el comerciante.
Comenta que por el precio que tiene, el traje puede usarse para cualquier otra ocasión con solo cambiar la corbata y la camisa. Conseguir abaratar el conjunto “se alcanza apretando los márgenes y a los proveedores”.
José Ángel Lupión lleva dedicado a la moda desde hace casi una década, un oficio que asumió casi de forma vocacional. Su tienda está abierta en la calle Arcos: “Al quedar desempleado hice realidad una idea antigua de tener mi propia tienda de ropa. Siempre me ha gustado este gremio”, habiendo trabajado en la desaparecida boutique Juva en la calle Larga.
“Los tiempos han cambiado y ahora se prefiere comprar tres prendas de calidad regular, que duran poco, en vez de comprar algo bueno pero más caro y por supuesto más duradero”, comenta Lupi.