El Palacio de Riquelme es uno de los ejemplos de dejadez del patrimonio jerezano. Catalogado incluso por la Junta de Andalucía y de estilo renacentista, esta joya de la plaza del Mercado sigue en estado ruinoso a pesar de las iniciativas hechas pública para su recuperación.
Los vecinos del entorno han denunciado que el patio ha vuelto a sufrir otro derrumbe recientemente. En concreto, del interior del palacio, donde se encuentran unos arcos sin columnas que se sostienen ya sobre el aire, siendo su situación más que precario y siendo muy probable que vuelvan a producirse derrumbes en las estructuras.
El edificio pertenece al Ayuntamiento, pero nada impide que se sigan produciendo estas caídas y el deterioro en una zona que pronto recibirá un pequeño empujón con la apertura del Museo del Flamenco y el de Lola Flores. Aunque también es cierto que la ubicación a escasos metros del Museo Arqueológico no ha impedido que el deterioro del palacio se siga produciendo.