Antonio Jesús Jiménez Robles es un jerezano que se ha hecho 7.000 kilómetros en una furgoneta para llevar productos de primera necesidad a Varsovia (Polonia) y traerse hasta la provincia, junto a otros siete voluntarios más, a 28 refugiados ucranianos.
Junto a tres de las hermanas ucranianas que han venido hasta nuestra tierra, Antonio Jesús estuvo el pasado fin de semana en Chapín viendo el partido del Xerez DFC.
Cofrade de la Hermandad de la Piedad, desde el Calvario han valorado el gran gesto de solidaridad de Antonio Jesús, que pidió vacaciones en su trabajo para aventurarse en esta misión de ayuda al pueblo ucraniano en estos tiempos de guerra.
El joven ha querido restarle importancia a su viaje. "Simplemente, hice lo que cualquiera hubiera hecho, ayudar a quien nos necesita", ha señalado en sus redes sociales.