El prestigioso y reconocido cocinero gitano Manuel Valencia abrió en 2010 su proyecto personal más ambicioso y soñado, La Andana, una nueva versión a lo grande del negocio hostelero que tantas satisfacciones le dio en la calle Moscatel. Sin embargo, la maldita crisis se llevó este sueño por delante y el local no pudo sobrevivir. Cerró en 2012 y acabó en manos de los bancos.
Desde hace ya algún tiempo, la división inmobiliaria de la Caixa, Servihabitat, tiene en venta un imponente edificio de nueva planta, construido en 2008, en el parque empresarial Oeste de Jerez, junto a la carretera de Sanlúcar.
Con 1.484 metros construidos, el anuncio oferta: "Edificio de uso industrial dedico a hostelería ubicado en el Parque Empresarial Oeste del municipio de Jerez de la Frontera. Está compuesto de salón de celebraciones, restaurante y cafetería. Se distribuye en dos plantas sobre rasante y una bajo rasante".
Con un precio de salida de 595.000 euros, "posee muy buenas comunicaciones ya que se encuentra muy próximo a la autovía que comunica con la Bahía de Cádiz y con la Costa Noroeste, así como con a la Estación de tren Renfe de Jerez, a 3 kilómetros y el aeropuerto a 17 kilómetros".
Valencia invirtió los ahorros de su vida y se la jugó con un proyecto que en su momento supuso un desembolso de millón y medio de euros. La crisis retrasó el proyecto de 2007 a 2010, y finalmente no salió adelante. Ahora el edificio, en una zona comercial e industrial muy poblada, donde triunfan otros restaurantes, como el mexicano Mama Lupe, está en venta y permanece a la espera de que un nuevo inversor lo devuelva a la vida.