Los socialistas jerezanos respaldan la voluntad de diálogo del gobierno municipal y confían en que la Junta de Andalucía ignore el "belicismo y el interés del PP local por bloquear esta actuación". La respuesta viene a colación de una nota remitida este mismo jueves por el partido de Antonio Saldaña en la ciudad sobre la petición de una reunión del Consistorio con la Junta para tratar, por la vía del diálogo, de desbloquear las obras de Corredera y Esteve. "El martirio al que Mamen Sánchez y el PSOE están sometiendo al centro de Jerez y a sus comerciantes tiene que acabar ya. Y en vez de recular de palabra, lo único que tiene que hacer Mamen Sánchez es adaptar el proyecto a la ley y enviárselo a la Junta, que lo está esperando para poder autorizar las obras", han dicho desde el PP de Jerez.
Por ello, el PSOE de Jerez ha lamentado que desde el PP "se haya saltado como un resorte ante el último ofrecimiento de diálogo del Ayuntamiento de Jerez a la Junta de Andalucía, y ha indicado que es inaudito que un representante político se quiera interponer en el diálogo entre ambas instituciones. Es evidente que al PP Local y a Saldaña le interesa por todos los medios paralizar este proyecto para dañar al gobierno local y ese es el motivo por el que intenta interferir y cuestionar este nuevo ofrecimiento de diálogo, una voluntad que desde el principio se ha demostrado con reiterados ofrecimientos".
El gobierno municipal y la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía han escenificado recientemente la capacidad de acuerdo que siempre significa avance para la ciudad, "y es evidente que a Saldaña ni le gusta ni le interesa". En este punto, los socialistas han lanzado una pulla al líder del PP en Jerez, recordándole que "no lo vimos saludando a la señora Mestre este pasado lunes en el Ayuntamiento". Mestre, delegada del Gobierno de la Junta en Cádiz y presidenta del PP provincial, ya dejó claro el pasado verano, a raíz del episodio de tráfico y alcohol de Saldaña, que políticamente estaba sentenciado, lo que no ha hecho más que deteriorar las ya de por sí pésimas relaciones que mantenían.
"La crisis de liderazgo en el Grupo Popular en el Ayuntamiento no puede ser ninguna razón para esta actitud obstruccionista y de caminar contra corriente. Ni es óbice para faltar a las normas más básicas de convivencia".