Una marcha de tambores fúnebres ha irrumpido este lunes 25 de noviembre en las calles de Jerez. Algunas personas pensaban que estaba saliendo una procesión de una iglesia, algo que tampoco sería muy descabellado. Pero no ha sido el caso. El ruido ha marcado el grito de las personas que han participado en la manifestación por el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, organizada por el Consejo Local de las Mujeres y Delegación de Igualdad y Diversidad del Ayuntamiento.
Ha sido una jornada para reivindicar la igualdad y condenar los asesinatos por violencia de género. "Stop terrorismo machista", se ha leído en una de las pancartas que han tomado el centro, donde se ha respirado el compromiso por poner fin a las violencias y por construir una sociedad igualitaria.
Bajo el lema,"Que la vergüenza cambie de bando", numerosas personas han alzado la voz copiando el grito de Gisèle Pelicot, que fue drogada por su exmarido y violada durante una década por decenas de desconocidos a los que él había reclutado por Internet.
A las 17.00 horas, ha tenido lugar el acto de colocación de la pancarta “contra las violencias machistas” como compromiso de adhesión a la primera manifestación estatal contra las violencias machistas en la puerta del Ayuntamiento. Acto seguido, la manifestación se ha desplazado hacia la plaza del Arenal, calle Corredera, plaza Madre de Dios, Rotonda del Minotauro, calle Medina, calle Honda y Rotonda de los Casinos.
Tambores, esquelas con nombres de mujeres asesinadas y otros mensajes reivindicativos han llegado hasta la plaza del Banco, donde representantes de la Asociación Mujer y Familia han procedido a la lectura del Manifiesto, sobre el Templete de la Alameda del Banco.
Así, han mencionado los nombres de los presuntos asesinos de todas las víctimas. "Por ellas, que ya no pueden hacerlo, asumamos nuestro papel en la sociedad para acabar con la violencia patriarcal y estructural que acaba matando y asesinando a las mujeres. Está en nuestra mano condenar cada uno de los machismos cotidianos que convierten a las mujeres en sujetos de violencia. Desenmascarar a los misóginos desde el primer chiste machista; poner en evidencia a los violentos desde el primer desprecio público, es responsabilidad de todas y todos", continúa el Manifiesto.
"Los agresores se sienten impunes, invencibles, delincuentes que la sociedad mira con buenos ojos, como en el caso de los puteros que abusan de las mujeres que son prostituidas. Son lo mismo. Siempre es lo mismo", añaden.
En esta lectura no han faltado propuestas de cambios de bando, "de la sociedad señalando al maltratador y no a la víctima", "en la justicia, con sentencias que rompan el patriarcado existente de forma contundente; "en los medios de comunicación, donde se muestra a la mujer como la bruja manipuladora y el maltratador como el tonto inútil"; en "la protección a los maltratadores y en el cumplimiento de las penas".
Durante la manifestación, han recordado a Nevenka, la primera mujer que hace 20 años denunció a un político que era su jefe; o Ana Orantes, primera mujer en denuncia a su marido en los medios de comunicación.
"Las mujeres abren puertas y señalan el camino a otras mujeres, al resto de mujeres víctimas. Dan pasos firmes hacia adelante, con honestidad y coraje", señalan desde esta marcha, en la que han estado presentes diversos colectivos feministas como Marea Violeta.
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