El 31 de octubre de 2021, un numeroso grupo de vecinos de la Asociación de Vecinos Nuestra Señora del Rosario denunciaba públicamente que un terrateniente de La Saucedilla estaba intentando echarlos como sea de la zona en la que llevan viviendo décadas. Dichos vecinos confesaban vivir atemorizados por el acoso y las amenazas de los herederos del último alcalde franquista de Cádiz. Incluso tenían problemas para acceder a sus parcelas debido a que el conocido como camino Gigonza-Los Pinos era bloqueado continuamente por uno de los herederos.
En su día, aunque lo intentamos, fue imposible conocer la versión de los señalados por los vecinos, el hijo y el nieto del alcalde Jerónimo Almagro y Montes de Oca. Ahora, casi un año después de la publicación del reportaje que aparece arriba de estas líneas, Jerónimo Almagro Ceijas se ha puesto en contacto con lavozdelsur.es para mostrar su malestar contra lo que entiende que es un ataque "contra el honor de Jerónimo Almagro y Montes de Oca, nuestro padre fallecido en 1986, que ya no está para defenderse y otros miembros de mi familia entre los que se encuentra mi hijo y yo".
Almagro Ceijas manifiesta que la finca El Chaparral pertenece a su familia y acusa a los vecinos de La Saucedilla de usurpar los terrenos de su familia desde hace más de un siglo. "Fue adquirida por mis antepasados (Juana Montes de Oca Lobatón, mi abuela) en el año 1923, como puedo acreditar con certificación del Registro de la Propiedad. O sea, hace 110 años. Finca que heredaron a su fallecimiento, primero nuestro abuelo, y, posteriormente, sus hijos. Entre ellos, nuestro padre ahora presuntamente difamado".
El referido heredero asegura que "los que difaman y denuncian a mi familia lo hacen desde las fincas y parcelas siguientes, que dicen pertenecer a una presunta comunidad de vecinos". Almagro Ceijas acusa de usurpadores a "algunos propietarios de algunas parcelas provenientes de la Finca Nuestra Señora del Rosario llamada de La Saucedilla, que tras la última división realizada por sus herederos es indivisible e inedificable, según consta en sus propias escrituras y en informes de la Delegación de Urbanismo del Excelentísimo Ayuntamiento de Jerez de la Frontera. Por tanto, todas las construcciones existentes en ella, salvo el primitivo Cortijo de Nuestra Señora del Rosario, son ilegales. Se puede acreditar con las escrituras que vienen unidas al expediente de demandas presentadas por ellos ante los juzgados de Jerez de la Frontera”.
También señala como usurpadores a los vecinos del realengo llamado La Saucedilla. "Terreno que procede del deslinde realizado en el año 1980 por el Excelentísimo Ayuntamiento de Jerez de la Frontera con la anuencia del Gobierno de entonces, y materializado sobre el terreno por el ingeniero topógrafo Adolfo López Cepero. Terreno que fue segregado de la finca El Chaparral, finca que posteriormente a ese deslinde ,en 1912, fue adquirida por mi abuela. Realengo que, tras aquella segregación y por tal concepto, es de dominio público y como tal, un bien inalienable, inembargable e imprescríptible de acuerdo con la Ley, que mi familia respetó siempre. Ahora usurpado en su totalidad por los que denuncian y que presuntamente difaman a mi familia a través de las publicaciones efectuadas en lavozdelsur.es”.
El terrateniente acusa también a los "usurpadores de las parcelas catastrales 104, 105, 106, 107 del Polígono 133 del T.M. de Jerez de la Frontera, que son propiedad de la Junta de Andalucía, o sea, Bienes Patrimoniales de la Administración Pública. Parcelas igualmente usurpadas por otros más que también denuncian y presuntamente difaman a mi familia".
Igualmente, habla de los "usurpadores del Arroyo de La Saucedilla. Por medio de las parcelas (realengo y patrimonio de la Junta de Andalucía) discurre un arroyo que, como bien de dominio público, igualmente es imprescriptible. Y es que, además de otras prohibiciones de construcciones en todo el paraje (especialmente el PGOU de Jerez), según Ley, está expresamente prohibido realizar construcciones ilegales en las zonas de policía (márgenes). Pues ha de saberse que todas las superficies de las repetidas parcelas, incluso las márgenes del arroyo ,han sido usurpadas y construidas por los que denuncias y presuntamente difaman y algunos amenazan de muerte a un miembro de mi familia".
Hace un año, los vecinos denunciaban que no podían acceder a sus fincas al encontrarse en muchas ocasiones con los obstáculos puestos por la familia de un terrateniente que, curiosamente, dice que son los vecinos los que tienen ocupado el carril. "Por en medio de dichas parcelas discurre un camino que igualmente fue dibujado en un plano por el ingeniero topógrafo Adolfo López Cepero, en misma fecha de 1908, objeto de litigio que se encuentra hora en el Tribunal Supremo, pendiente de sentencia. Camino que, en realidad, se encuentra usurpado por los denunciantes y desviado hacia terrenos propiedad de mi familia, según puede comprobarse en el plano de la época elaborado por Adolfo López Cepero".
Por último, Almagro Ceijas considera que también han sido usurpados los terrenos de la Finca El Chaparral, "propiedad de mi familia desde 1912 y que actualmente se encuentra invadida y ocupada en una superficie aproximada de 4.000 metros cuadrados por usurpadores en la que igualmente han construido ilegalmente los que también denuncian y presuntamente difaman".