Fernando Benítez Romero, de la hermandad de Amor y Sacrificio, se querella contra José Mazuelos, varios cargos de la diócesis y el párroco de Madre de Dios.
El ex hermano mayor de la hermandad de Amor y Sacrificio, Fernando Romero Benítez, ha denunciado al obispo de la diócesis de Asidonia-Jerez, José Mazuelos, así como al Vicario General de la Diócesis de Asidonia-Jerez, al párroco de la parroquia de Madre de Dios, al delegado diocesano de Hermandades y Cofradías y a un miembro del gabinete jurídico del Obispado de Asidonia-Jerez por un presunto delito de prevaricación y estafa. El propio Romero Benítez ha sido el que ha puesto en conocimiento estos hechos a través de su perfil de Facebook, donde ha colgado la copia de la denuncia que interpuso el pasado 7 de junio en el juzgado de Instrucción número 2 de Jerez.
En cuanto al presunto delito de prevaricación, señala que tanto el obispo como las demás personas a las que va dirigida la querella favorecieron “claramente” a unos hermanos de la cofradía “en perjuicio de su persona” durante el último proceso electoral en la hermanda de Amor y Sacrificio. Así, considera que dichos hermanos “no presentaron la documentación requerida en la normativa diocesana y tal como me indica personalmente el propio obispo en conversación telefónica” y tal como se indican en unos documentos que ha remitido al juzgado.
Sobre el presunto delito de estafa, argumenta en la denuncia que “se pretende cobrar una cantidad de euros sin documentación legal para el cobro de la misma y la negativa reiterada a presentar una documentación en forma y tiempo que sea legal, tal como se les ha solicitado por mí en varias ocasiones”. Además, señala que dicha situación “está dañando mi imagen y perjudicando mi vida tanto laboral como social”.
Romero Benítez solicita que la Fiscalía inicie la instrucción de las actuaciones y pide que se investigue “la forma que tiene esta institución –el obispado- de realizar sus supuestos cobros con medios presuntamente ilegales”. Igualmente pide que se investigue “la reciente cesión de la parroquia de Madre de Dios que tal como se comunicó en un cabildo de la hermandad estaba aún inscrita a nombre de una persona fallecida hace ya muchos años”.