Hasta 43 personas han sido detenidas en Málaga en el marco de una operación contra la explotación laboral de personas inmigrantes.
La Policía Nacional inició las investigaciones el pasado mes de noviembre al recibir una alerta de la Oficina de Extranjeros de la Subdelegación del Gobierno que advertía de varias empresas del sector agrícola, ubicadas en la provincia malagueña, que estarían utilizando su actividad legal para ocultar la comisión de varios delitos.
Así, pudieron seguir la pista a un total de 7 empresas distintas que explotaban a personas inmigrantes, principalmente de origen marroquí, a los que cobraban entre 1.500 y 3.000 euros por contratos ficticios con los que defraudaban a la Seguridad Social y regularizaban de forma fraudulenta a las víctimas.
Aprovechándose de su situación de necesidad y de la falta de permiso de residencia y trabajo, el entramado presentaba a estos trabajadores ante las administraciones laborales con las identidades de otros ciudadanos extranjeros que sí estaban en situación regular en España.
Además, algunos de ellos vivían hacinados y en condiciones infrahumanas en casas propiedad de los líderes de la organización. Los agentes han registrado cuatro domicilios en la provincia de Málaga donde se han intervenido 56.985 euros en efectivo, cuatro teléfonos móviles y abundante documentación relevante para la investigación.
Después de las averiguaciones realizadas, los investigadores consideran que las empresas analizadas también podían estar cometiendo diversos fraudes tributarios relacionados con los impuestos del IVA, IRPF e impuesto de sociedades, y que el grupo criminal contaba con la colaboración de varios empleados de una gestoría y una abogada.