El Gobierno de España deja paso libre al proyecto para construir un bar-restaurante con terraza en el faro de Trafalgar.
En una respuesta a la parlamentaria por Cádiz y vicepresidenta del Congreso de los Diputados, Esther Gil de Reboleño (Sumar), el Ejecutivo asegura que la propuesta "es compatible con los usos propios de señalización marítima de los faros".
Para respaldar su pronunciamiento, la notificación oficial remite al contenido del artículo 72 de la Ley de Puertos del Estado.
Sumar había presentado esta pregunta en el Congreso de los Diputados el pasado mes de febrero, tras las movilizaciones realizadas por distintos grupos vecinales y ecologistas en el tómbolo de Trafalgar, monumento natural, desde el pasado mes de diciembre.
Portavoces de estos grupos de oposición, que han desarrollado una intensa labor de rechazo con protestas presenciales y en plataformas digitales que han recogido más de 10.000 firmas contra la instalación, consideran que la batalla está definitivamente perdida.
La resignación llega después de que la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz diera curso a solicitud el pasado 23 de octubre de 2023. La Demarcación de Costas Andalucía-Atlántico también dio luz verde dos meses después y ahora llega el placet del Gobierno.
Tanto el Ayuntamiento de Barbate como la Junta de Andalucía tampoco se han opuesto desde el inicio al desarrollo de esta explotación comercial, combinada con la instalación de un "centro de interpretación" sobre el protagonismo histórico de este faro y su entorno.
El centro de interpretación tendrá dos áreas, una dedicada a la batalla naval y otra a la fauna y la flora del entorno
"El proyecto seleccionado desarrolla su diseño orientado a la minimización de los posibles impactos ambientales, e incluye un documento ambiental con análisis y propuesta de medidas para garantizar la protección ambiental, del medio atmosférico, la fauna, la flora y el paisaje", añade el Gobierno en su respuesta.
En el proyecto que el Ejecutivo acepta, el acceso al faro estará restringido y no se permitirá el aparcamiento de vehículos, por lo que los usuarios del bar-restaurante deberán acceder a este nuevo espacio andando, en bicicleta o a través de un servicio de lanzadera eléctrica.
Las medidas de protección medioambiental incluyen la protección de la vegetación y la fauna del entorno con la construcción y mejora de los viarios, así como la conservación de árboles y especies de interés.
Las medidas preventivas también contemplarían, según recuerda esta respuesta, una replantación de especies autóctonas así como medidas para evitar daños al dominio público marítimo-terrestre.
Según detalló la Autoridad Portuaria en la aprobación inicial de diciembre, el centro de interpretación se divide en dos espacios en la antigua vivienda de los fareros: uno interior con una superficie de cien metros cuadrados, con varias salas expositivas relativas al propio faro y a la histórica batalla de Trafalgar.
La propuesta aceptada impide el aparcamiento o el acceso en coche y contempla la contratación de hasta 41 personas en el bar con terraza en temporada alta
Otra área expositiva sería exterior, con el detalle de la flora y fauna autóctonas, entre otros conceptos. La inversión de equipamiento del centro de interpretación asciende a 123.600 euros.
El proyecto de restauración, por su parte, plantea una carta con productos propios de la zona y de Andalucía, con especialidad en arroces y variedad de carnes y pescados. El restaurante dispondrá de terraza exterior, comedor interior y barra para aperitivo.
Con una inversión total de 838.850 euros, el proyecto plantea la contratación de 22 personas residentes en el entorno para la temporada baja. En temporada alta, los trabajadores pueden llegar a 41.
Está prevista la posibilidad de contratación de personas mayores de 50 años, en situación de riesgo de exclusión social así como la aplicación de criterios de paridad en la plantilla.
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