El pasado mes de octubre, en el marco de la operación policial Bocha, la Unidad contra las Redes de Inmigración y Falsedades de la Comisaría de Policía de Algeciras llevó a cabo una investigación sobre una empresa dedicada al polo que se podría estar aprovechando de ciudadanos extranjeros en situación irregular y de extrema vulnerabilidad.
Tres personas, a las que se les imputaron delitos de trata de seres humanos con fines de explotación laboral contra los derechos de los trabajadores, favorecimiento de la inmigración y falsedad documental, fueron detenidas. Con la falsa promesa de ayudarles a regularizar la situación en España y obtener un contrato formal y justamente remunerado, los migrantes eran captados por la referida empresa y se les imponían condiciones laborales abusivas, largas jornadas de trabajo y sin apenas descanso diario. Todo ello a cambio de un sueldo muy por debajo del establecido como el mínimo profesional.
Dos meses después de aquellas detenciones, la empresa sigue ofertando puestos de trabajo con las mismas características. Una ciudadana ha contado en Twitter que ayer mismo recibió una llamada y "solo con escuchar los requisitos para trabajar allí, me dio una pista de las condiciones laborales. Piden recepcionista, pero también ejerces de camarera y limpiadora. Tienes que poner lavadoras, tender la ropa de cama y toallas, recoger y guardar".
"De estar sentada en la recepción nada, ¿eh? Que trabajar delante de un ordenador no es trabajar", le dijeron desde la citada empresa a esta mujer, que ha desvelado las condiciones de la oferta laboral. "Jornada de siete de la mañana a siete de la tarde. Todo ello por 800 euros al mes, todo incluido. Y después dicen que la gente es una vaga y no quiere trabajar".
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