El Comité de Huelga de la planta de Acerinox en Los Barrios, cuyos trabajadores cumplen este miércoles cuatro meses en huelga indefinida, han mantenido en la mañana del martes una reunión con los diferentes grupos parlamentarios para exponer la situación que viven desde hace semanas ante la negativa de la empresa a firmar un nuevo convenio colectivo que supongan mejoras para las condiciones laborales de los trabajadores.
En el encuentro han estado presente los cuatro partidos que forman la oposición: Por Andalucía, Adelante Andalucía, PSOE y Vox. Todos ellos, a través de algunos de sus diputados, han escuchado las demandas de la plantilla y la situación actual del conflicto después de que el lunes tuviera en lugar en Madrid una reunión con Acerinox en la que tampoco hubo acercamientos. Además, la empresa emitió un comunicado con su intención de ejecutar un ERE que supondría el despido de unos 500 trabajadores en la factoría.
En esta reunión celebrada en una de las salas de comisiones del Parlamento de Andalucía tan solo ha faltado el grupo mayoritario de la Cámara. El Partido Popular no ha estado presente con ninguno de sus 58 diputados en un encuentro que, aunque no tenía carácter oficial, ha transcurrido con la misma dinámica que una comisión parlamentaria.
José Antonio Gómez, portavoz del propio Comité de Huelga, ha mostrado su sorpresa con la ausencia del partido de Gobierno después de que la mediación del Consejo Andaluz de Relaciones Laborales haya fracasado. Los trabajadores, de momento, no han recibido ningún tipo de mensaje o llamada por parte de los dirigentes autonómicos de la Junta de Andalucía. "Hemos venido a transmitirle al señor Moreno y a su consejera de Empleo (Rocío Blanco) nuestra preocupación por la mediación, pero nos hemos llevado una sorpresa cuando no han asistido", ha manifestado Gómez tras los primeros minutos de reunión.
La plantilla, a pesar de la dureza del proceso, sigue unida. "No vamos a aceptar ni vamos a permitir que salga nadie de la empresa de forma dramática", han asegurado los trabajadores sobre el plan de despidos que tiene la empresa. En la plantilla piden a la Junta que pongan de su parte para arreglar un conflicto que afecta de lleno a toda la comarca, aunque directamente a 1.800 familias que ya pasan complicaciones económicas y que muchas de ellas se están viendo obligadas a pedir comida.
Los trabajadores reivindican la posibilidad de que la empresa devuelva subvenciones públicas como medida de presión para firmar el convenio que piden. "La empresa se aprovecha de los ERTE que pagamos todos los españoles. Nos estamos viendo desamparados. Pedimos a la Junta que actúe cuando la empresa quiere imponer su criterio", ha afirmado de forma rotunda Gómez.
La reunión del lunes volvió a celebrarse sin avances reseñables, algo que ha mermado el ánimo de una plantilla que ya reconoce el nerviosismo. "No aguantamos más porque se nos ha faltado mucho el respeto", recalcan. Los afectados también echan en falta una mayor repercusión. "Esperemos que la empresa recapacite. Hemos solicitado una reunión para retomar la negociación donde la habíamos dejado antes de la propuesta del CARL".
La acampada, en el aire
Estaba previsto que a partir del miércoles comenzara una acampada en Algeciras por parte de los trabajadores, donde la intención era colocar una barra para lograr ingresos para la caja de resistencia. Sin embargo, a falta de pocas horas para el inicio de la protesta, el Ayuntamiento de Algeciras ha comunicado que hacen falta varios permisos y seguros, unos datos que no había facilitado el Consistorio en las reuniones anteriores, según los trabajadores.
"Estamos valorando si al final se suspende o aplaza porque evidentemente los trabajadores no tenemos el dinero para el seguro y para el proyecto que nos piden. Estamos recaudando dinero para dar de comer a muchas familias", denuncian los trabajadores afectados a pocas horas de que se cumplan cuatro meses de huelga.