Varias personas usuarias del parking de La Pasarela de El Puerto han compartido su malestar en redes sociales desde que este permanece abierto. El aparcamiento, gestionado por la empresa municipal Impulsa El Puerto, se somete en las últimas semanas a trabajos de mejora.
Desde entonces, "hay gorrillas chantajeando e intentando intimidar a las personas que no quieren pagar". Según denuncia un usuario, ya ha habido una agresión a una pareja mayor de autocaravanistas extranjeros, así como daños a varios vehículos cuyos dueños no han querido pagar y un intento de agresión a una persona discapacitada.
"Además de acoso a los abonados del parking por parte de este colectivo, les da lo mismo personas mayores que familias con niños pequeños presentes para soltar sus amenazas veladas", manifiestan.
La empresa municipal está al tanto de esta problemática y ha asegurado que "ya hemos procedido a dar parte a la Policía para que expulse del aparcamiento a ese individuo que pide dinero, ya que no es personal del parking ni de ninguna empresa contratada por el Ayuntamiento o por Impulsa".
Impulsa El Puerto recuerda que actualmente está trabajando en una mejora del sistema "que tardará algo de tiempo en implementarse, de manera que mientras que estamos en ese proceso, evidentemente, no se le cobrará al abonado".
El control de aparcamiento queda suspendido hasta la finalización de las mejoras del mismo. "El periodo de tiempo cobrado de su abono y no disfrutado se le descontará cuando comience el nuevo servicio", informa la empresa, que también ruega a la ciudadanía que "cualquier incidencia con aparcacoches ilegales lo comuniquen a la Policía".
La presencia de gorrillas en aparcamientos públicos es común en la ciudad. En la Plaza de Toros o en la Bajamar, se apoderan de la zona, aunque la mayoría no suele causar problemas cuando los conductores deciden no pagarles.