Desgarrado y en un estado ruinoso. El mítico Vaporcito de El Puerto sobrevive en medio de las obras del Paseo Fluvial que transformará la zona. La ciudad mira al Guadalete desde el varadero, donde no pasa desapercibido este símbolo portuense que alberga tantos recuerdos. Ya se ha instalado la nueva pasarela peatonal delante de la nave, en un estado deplorable e incluso objeto de vandalismo desde hace años. ¿Qué futuro le espera?
Hace dos años, la asociación portuense El Vaporcito, dueña legal del barco, planteaba restaurarlo con el fin de rescatarlo del olvido y "en el momento en el que esté terminado se lo vamos a ceder al Ayuntamiento para que ellos le den vida y no sea un monumento como el que está ahí enfrente”. El emblema abandonado desde hace casi una década no navegaría, pero estaría presente en la ciudad. El objetivo era que albergara una exposición en su interior sobre su propia historia. En su momento, el Ayuntamiento afirmó que “permitirá su colocación en un punto privilegiado de la Ribera del Río, muy cerca del que fue su punto de atraque durante muchas décadas”.
Sin embargo, el proyecto está paralizado. En septiembre de este año, cuando Germán Beardo, alcalde del municipio, inició su segundo mandato, afirmó, en una entrevista a Diario de Cádiz, que le había solicitado a la propiedad que lo sacase de allí y lo llevara a un taller o a una nave para su reforma. "Está en un estado crítico y genera inseguridad al ciudadano, que ahora puede pasear por ahí", dijo.
En cambio, la asociación portuense manifestó que no lo iba a retirar mientras que estuviese catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC) por temor a que sufriera un daño mayor. No lo harán hasta que no tengan una orden por escrito del Ayuntamiento y una autorización de la Junta en la que quede descatalogado como BIC. Si al vapor le pasase algo teniendo esta calificación, se consideraría un posible delito contra el patrimonio por parte de sus propietarios.
En estos momentos, la asociación se encuentra a la espera de un encuentro con el Ayuntamiento, con el fin de concretar el rumbo del Vaporcito. "Hay silencio administrativo, estamos a la espera. Hemos tenido varios contactos con el Ayuntamiento y estamos a la espera para ver qué pasa", ha trasladado José María García Flores, presidente de la asociación, a lavozdelsur.es. La actual propietaria no cuenta con los medios económicos suficientes ni para su restauración ni para su retirada, pese a las iniciativas que ha llevado a cabo en estos últimos años para recaudar fondos.
Javier Bello, primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de El Puerto, ha trasladado a este medio que "nosotros no tenemos la potestad de decidir lo que se va a hacer porque no somos los propietarios". Según comparte, "he hablado con ellos varias veces, el vapor está en una situación que no es digna para lo que ha sido y empieza a ser peligrosa. El paseo fluvial será inaugurado en breve y la situación no es la adecuada".
Javier recuerda que el alcalde ya les había instado a que lo retirasen, pero "cuándo y cómo lo tiene que decidir la asociación". El delegado espera que cuando se inaugure el paseo fluvial, el Vaporcito ya se haya retirado.