El fiscal jefe de Jerez, encargado también de la Sierra y la Costa Noroeste, Francisco García Cantero (Marbella, 1957) explica la situación de la criminalidad concreta en la zona, advirtiendo del aumento del narcotráfico y reclamando un fiscal concreto para esa especialidad, pues comparte su actividad con la de otro tipo de casos, lo que dificulta las pesquisas. Puede leer aquí la primera parte de la entrevista, donde habla sobre su concepción de la Justicia o sobre los encarcelamientos de dos alcaldes en Jerez.
Una de sus reivindicaciones es la creación de una fiscalía antidroga específica para Jerez.
Lo estimamos necesario, un fiscal delegado de la fiscalía antidroga. Tanto por número como por calidad de los asuntos. Lo que hay es un fiscal adscrito, que no pertenece a la fiscalía especial, pero claro, no en exclusividad. Abarca Sanlúcar y Rota, y la Sierra, con los cultivos de marihuana, un hecho novedoso, desgraciadamente, y en aumento. Cada vez más especialización. Y más propensión a medios violentos, por los famosos vuelcos.
Esos robos entre narcotraficantes se ven más en los medios últimamente. ¿Tiene que ver con la llegada de mafias de fuera o es que se han violentado los autóctonos?
Ahora se ven armas en registro de marihuana. Es por ambas cosas, hay organizaciones violentas, pero también pasan aquí del menudeo a una mayor organización. Hay un trasvase del trapicheo o los hurtos al tema de la marihuana. Algunos hechos recientes de agresiones a cuerpos policiales, tienen la alegación de que los agresores no eran guardias civiles sino que pensaban que eran otras organizaciones.
¿Pero ha crecido el narcotráfico o es que ahora les pillan más?
Se desmantela una red y sale otra, ha crecido el fenómeno. El refuerzo policial, judicial y fiscal en el Campo de Gibraltar supone mucho tráfico desviado a la zona de Manilva y a Sanlúcar y Rota, hay más aprehensiones de las que se venían produciendo. Y el cultivo ocurre en solares, en campos de cultivo o en zonas boscosas. Y en naves industriales, fincas rústicas, y bloques de viviendas. Es peligroso y molesto para los vecinos. Es un fenómeno en ascenso.
Se habla del paro, estar en frontera con Marruecos... ¿Qué hace a esta zona tan proclive?
Hay muchos factores... La situación económica hace que muchos vean esa salida. La proximidad de Marruecos también favorece.
"En las acusaciones de violencia de género no se altera el principio de presunción de inocencia. No se acusa a un hombre por ser hombre"
¿Pero si bajara el paro a las tasas de otras regiones se apagaría el narcotráfico?
Apagarse es difícil mientras haya consumo. Debe combatirse el tráfico pero también el consumo, la resocialización de los consumidores, y que haya mensajes claros que evidencie la negatividad del consumo de drogas.
En el caso de delitos sexuales, ¿ha sido un hito el 8-M o en la percepción de la sociedad el caso de La Manada? ¿Quizás un entendimiento de que cosas que se toleraban no lo eran en ningún caso, también para lo específico de la violencia de género y el maltrato en la pareja?
Es pronto para saber si supondrá una disminución de la violencia sexual, los fenómenos sociales tienen que tener su tiempo para comprobarlo. Pero venimos de atrás con la violencia de género, de reformas de 2004. Se dice que no ha hecho que disminuya, pero es que ahora se denuncian muchas más cosas. Hay más conciencia de lo delictivo de una conducta. Es difícil comparar, porque es una lacra que no es solo de hace 20 o 30 años, sino anterior.
¿Cómo ve las reformas que atañen al Código Penal de la ley que quedó prácticamente aparcada por el 8-M?
La diferenciación entre abuso y agresión que hace el Código del 95 me parece acertado. La diferenciación entre atentar contra la sexualidad con violencia o sin ella. Es peor además sufrir para una víctima ese atentado sexual con violencia o intimidación. En el abuso no hay consentimiento pero no se emplean elementos denigrantes o vulneradores como sí en la agresión. En el tema del consentimiento, el legislador tiene que ser muy prudente y cauto. Puede dar lugar a situaciones paradójicas.
En ese sentido, ¿es difícil mantenerse lejos de esas áreas grises?
Son frecuentes las áreas grises. El derecho penal hace que prime la seguridad jurídica y se legisla para evitarlo, pero hay situaciones en la línea entre lo delictivo y lo que no lo es. Cualquier rama del derecho tiene esa cuestión. La vida siempre va más allá de las previsiones del legislador, y no sabes dónde encuadrarlo. Hubo un movimiento del XIX basado en la codificación, en crear códigos, para que el juez fuera un autómata. Eso se vio imposible, la vida siempre va más allá. Las áreas grises son inevitables.
¿Por qué se pone el acento en las denuncias falsas sobre estos delitos pero no sobre otros, si por ejemplo el fraude a seguros a menudo implica denuncia falsa?
La materia de violencia de género ha llevado a la reflexión, con objeto de recursos ante el Constitucional, y no se trata de eso. Eso no implica que se altere el principio de presunción de inocencia. El hombre no es culpable por ser varón. Eso se engarza con lo otro. Se hace hincapié porque se considera que hay una situación, hiere sensibilidades, y si no vulnera el principio de presunción y el de igualdad ante la ley.
Las medidas preventivas, como alejar de una vivienda a una persona, sería como otras medidas preventivas existentes.
Las hay en muchos casos para evitar estas situaciones. Numéricamente, hay muchos quebrantamientos de condena o medida cautelar. A veces porque son difíciles de cumplir, por ejemplo en una localidad pequeña, sobre todo con las pulseras. La alarma salta cuando se rompe el alejamiento, pero el victimario no puede saber si está 201 metros o 199. Eso genera muchos asuntos penales, pero el quebrantamiento requiere intencionalidad. Y si un juez, en cualquier caso, no lo tiene claro, absuelve. Luego hay penas a cumplirse en el propio domicilio, o trabajos en beneficio de la comunidad. Eso requiere una actuación del penado. Eso genera incumplimientos. A veces incluso por ligereza, que alegan no tener muy claro las obligaciones.
¿Qué otros fenómenos importantes son típicos de Jerez?
Según la memoria de la Fiscalía, preocupa el aumento entre menores, cada vez más casos de violencia intrafamiliar, contra padres o hermanos. También entre menores hay más delitos sexuales, incluso siendo la víctima mayor de edad. Y también un incremento notable de violencia de género entre menores. Se denuncia poco y se ve que se soportó demasiado tiempo. Hay resistencia, parece, a denunciar a otro menor. Denuncian los padres cuando saben que su hija está siendo víctima de violencia de género.
¿Qué está pasando para que esto ocurra?
El análisis, seguramente, sería complejo. Hay muchos elementos. En casos son familias mal estructuradas, pero en otros no, y es sorprendente. Puede pensarse en familias monoparentales, o el descuidado de un menor, pero hay familias absolutamente normal. Estudiar el porqué daría lugar a estudios sesudos. La impresión es que es una amalgama de motivos familiares, sociales y educativos. Quizás falta de referencias éticas claras en algunos casos, un ejercicio laxo de la autoridad parental, o factores sociales que animan la desobediencia... El tema es muy complejo.
"Un menor es un libro abierto, por escribir, y puede reconducirse en mayor medida que un adulto"
¿Qué dice ante eso de que falta mano dura en la Justicia?
Entiendo que las penas son adecuadas. Para delitos muy graves, quizás, podría ampliarse el internamiento en centros de reforma, pero no quiero dar la impresión de que el problema sea que sean penas leves. Lo que inspira la legislación de menores-reforma es la legislación, porque se considera que existe en mayor medida que entre los adultos una posibilidad de reconducir la trayectoria vital del menor. Es un libro abierto, por escribir, y puede reconducirse.
Las famosas okupaciones, ¿a quién afecta mayoritariamente? ¿Entidades, bancos, sociedades, o contra particulares?
Afecta a viviendas desocupadas de entidades, pero también de particulares. La ocupación por vía penal son delitos leves. Eso dificulta la intervención inmediata de la Justicia. El perjudicado quiere la inmediata recuperación. Ha habido una iniciativa de la Fiscalía General para activar la respuesta penal y la recuperación. Legislativamente, sería conveniente que se contara con más instrumentos jurídicos para reponer a la víctima a la situación anterior. Se trabaja para actuar con prontitud.
Otra cuestión que aumenta es la criminalidad informática.
Es muy amplia. Abarca hechos delictivos de distinto tipo: sexual, intimidad, propiedad... Se confía en plataformas y hay que ser muy cautos, como objetos de segunda mano o arrendamiento de viviendas.
¿Afectan más a quienes no son nativos digitales, los mayores?
Los ancianos no suelen acceder a internet. La confianza excesiva es universal, ni siquiera diría que no afecte a los jóvenes menos, porque la compraventa de segunda mano afecta más a jóvenes que a personas digamos maduras.