Ustea Cádiz denuncia el recorte de ocho unidades de Educación Infantil en Jerez para el curso 2020-21, basándose en la comunicación recibida en los centros escolares el pasado 31 de enero sobre las unidades autorizadas por la delegación territorial de Educación de Cádiz para el próximo curso escolar, en especial las autorizadas para Educación Infantil de 3 años. El sindicato censura así esta nueva oleada de recortes en la educación pública.
Ustea Cádiz entiende que las familias no van a arriesgarse a solicitar un centro para su hijo donde haya más solicitudes que plazas autorizadas y puedan quedarse sin poder hacer la matrícula en ese centro. El sindicato señala que resulta poco factible la posibilidad de no perder la unidad recortada en esta previsión de unidades, ya que el servicio de planificación de la delegación territorial sólo contempla mantener las unidades “si hubiera gran demanda”, sobre todo cuando ya en años anteriores se solicitó por escrito y la respuesta fue una negativa. Únicamente tuvo lugar la rectificación del recorte de la unidad en aquellos casos en los que hubo fuertes movilizaciones por parte de Ampas, sindicatos, plataformas y comunidad educativa en general.
El sindicato, así, denuncia que se desconocen los motivos de selección de los centros a los que se le retira la unidad. A las familias, a los centros, a la comunidad educativa en general les gustaría que la delegación provincial aclarase los motivos y los criterios para seleccionar estos centros, en algunos casos premiados a nivel andaluz por sus buenas prácticas, apunta Ustea.
La sección sindical señala que no hay un ajuste equitativo de unidades entre la Educación pública y la concertada. "¿Acaso el servicio de planificación ha realizado algún tipo de estudio que nosotros desconocemos, y sabe de antemano que esos 200 alumnos de tres años que habrá de menos, según el censo municipal, iban a pedir plazas en centros públicos?", se preguntan con ironía. Hay casos como el del CEIP La Marquesa, que hace unos años que era el centro con más solicitudes de todo Jerez —casi 150 solicitudes para 75 plazas— y aun estrenando ese año un nuevo aulario con un coste superior al millón de euros se le recortó una unidad.
Ustea considera que la bajada de natalidad no debe servir de excusa para justificar recortes en la educación pública y que, por el contrario, puede constituir una oportunidad para lograr esa calidad educativa de la que tanto hablan los políticos, con medidas como la bajada de las ratios. El sindicato exige que haya aulas de tres años con 20 alumnos, posibilitando así el mantenimiento del número de unidades y del profesorado; una enseñanza mejor y más individualizada al alumnado; mayor dotación de personal para cubrir apoyos y proyectos educativos; y una mayor atención a la diversidad a las necesidades específicas de apoyo educativo.