El 23 de marzo, un menor con necesidades especiales que estudia en el CEIP San Juan de Ribera de Bornos recibió, según relata su madre, una agresión por parte de una maestra del centro.
Los hechos fueron denunciados por la familia a la dirección del centro y, tras 44 días de espera, Nadia Gutiérrez decidió hacer público el caso al ver que nadie desde Educación se ponía en contacto con ellos para ver qué había pasado y cómo se encontraba el menor.
Una vez realizada la denuncia pública, por fin un inspector contactó con la familia. Tras interesarse por el asunto, el inspector en cuestión empezó a dar vueltas a la pelota y la dejó finalmente en el tejado del centro, que ha tomado la decisión de no abrir ningún expediente sancionador a la docente al entender que no hay indicios.
Al ver Nadia las numerosas contradicciones entre unos y otros, y teniendo la convicción firme de que su hijo fue agredido según el testimonio del menor y el de sus compañeros de clase, la familia ha decidido llevar el asunto a los juzgados.
Considera que la actuación de Educación en este tema ha sido nefasta y por eso entienden que no les queda otra que recurrir a la vía judicial para esclarecer lo sucedido.
Comentarios