El presidente de la patronal de la hostelería en la provincia de Cádiz, Antonio de María, cree que la imposición de una tasa turística es "un error" al entender que con su aplicación "incrementarían los precios", que es lo contrario a lo que se debería hacer.
El polémico representante del sector, en el cargo durante más de 25 años, considera que el sector apuesta por "abaratar y no encarecer más", por lo que esta medida sería un obstáculo.
De María hace estas declaraciones después de que la Junta de Andalucía, tras un largo debate interno, se haya mostrado partidaria de impulsar esta medida siempre que esté precedida de un consenso con el sector empresarial turístico y hostelero.
"Los ayuntamientos tienen que desarrollar la limpieza y el mantenimiento de jardines o patrimonio con turistas y sin turistas"
Las palabras del representante de la patronal gaditana parecen señalar que ese acuerdo total está muy lejos.
"La tasa es el pago que se hace de un servicio recibido, como basura o limpieza. Cuando recibes un servicio tienes que pagar una tasa pero esto es un impuesto puro y duro", afirma Antonio de María en declaraciones a Europa Press.
El representante empresarial cree que se justifica la puesta en marcha de esta medida con su utilización para el refuerzo de servicios como la limpieza, los jardines o mantenimiento de monumentos y patrimonio, algo que en su opinión "son acciones que tienen que desarrollar los ayuntamientos con turistas y sin turistas".
Que el Gobierno ayude con las playas
De María señala al Gobierno de España como la administración que "debe intervenir con un fondo de compensación" para esos pueblos "más turísticos" de la costa de Cádiz que cada verano acogen "a miles de turistas en sus playas", con el consecuente "encarecimiento" del mantenimiento de los servicios que se prestan en el litoral. "Lo tendría que compensar el Estado y que no sea el turista el que asuma esa cuota", añade.
Sobre la "demonización" del turista, el presidente de Horeca entiende que los visitantes, ahora, están "sensibilizados" y "comprometidos" con el cuidado y el respeto del entorno que visita, que ya no es "turismo feroz" de antaño que "se llevaba las piedras de los yacimientos".
Igualmente, argumenta que esta tasa turística afectaría no solamente al turista que viene a la provincia de vacaciones sino también a quien se aloje en un establecimiento hotelero por cuestiones laborales, deportivas o circunstancias personales que obliguen a alguien a hacer noche en otra ciudad.
"Es como si cada persona que llega a un comercio diera dos euros a la entrada"
Es por eso que ha denunciado que de implantarse esta tasa, se "impondría al ciudadano" no solamente al "turista tipo". "Bajo cualquier punto de vista no es interesante porque es un impuesto puro y duro, aunque lo enmascaren como una tasa y le pongan otro nombre".
El presidente de Horeca cuestiona que otras asociaciones como la de los comercios se muestren a favor de una tasa "que no les afecta" directamente, interpelándoles a saber si estarían de acuerdo en imponerla si "cada persona que llega a un comercio diera dos euros a la entrada".
Según afirma, eso provocaría una merma en la entrada de clientes en estos establecimientos, por lo que no entiende que se defienda esta medida para los hoteles.