El Ayuntamiento de Sevilla ha informado al juzgado de que ejecutará este septiembre la sentencia que le obliga al cese de 44 agentes de la Policía Local, quienes accedieron a través de la oposición de 2012. Estas pruebas fueron tumbadas por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo al producirse "irregularidades invalidantes".
Este lunes, según informan medios locales, ha sido remitido al juzgado el dictamen del Ayuntamiento de Sevilla, que señala la extinción de la relación entre el Consistorio y los aún funcionarios.
Durante el verano, ya se irán dando pasos para la rescisión, pero según el Departamento de Recursos Humanos, se trata de una sentencia compleja tanto por el número de policías que serán destituidos como los 11 años que han pasado trabajando para la ciudad. Asimismo, algunos de los órganos que deberán firmar los ceses son recién llegados al cargo, tras el relevo en el gobierno municipal derivado de las elecciones del 28 de mayo que dio la alcaldía a José Luis Sanz.
Además, el cese del casi medio centenar de agentes es un paso fundamental para que se puedan convocar de nuevo las pruebas, que sufrieron irregularidades como una filtración. Otra de las dificultades deriva que algunos de los miembros del tribunal ya no son funcionarios, por lo que habrá de constituirse un nuevo órgano que dictamine los méritos de los participantes.
En paralelo a los pasos administrativos que se están dando, un grupo de 33 policías afectados por los ceses ha presentado un incidente de ejecución respecto de la sentencia, que tendría como fin reconocer la imposibilidad de que se lleve a cabo lo dictado por el juzgado. El argumento: los graves daños que supondría para la seguridad de la ciudad, y la "muerte civil" de los policías locales. El juzgado tendrá que pronunciarse al respecto, una de las últimas balas para impedir un cese al que el Ayuntamiento ya le ha puesto fecha.