"Este barrio ¿por qué no lo bombardean y lo dejan llano para un aparcamiento? No se perdería absolutamente nada". "Son gitanos, qué se puede esperar de esa escoria". "Una bomba y se acabó todo". "El día que entre el ejército y eche a todo el mundo de allí, tiren esos edificios y ponga esa zona top. Estaremos todos contentos. Que los manden en medio del campo". Es solo una muestra de los mensajes de odio que se han podido leer en las últimas horas en la red social X en referencia al tiroteo que ha causado horror a los vecinos de las Tres Mil Viviendas de Sevilla.
Decenas de proyectiles han sobrevolado el cielo este sábado por la noche en la barriada de Murillo conocida como los Verdes. Suceso que ha generado comentarios de todo tipo. Sergio Codera, párroco de los Salesianos Jesús Obrero, ha transmitido desde la parroquia que hay un sentimiento de "mucha tristeza" entre los vecinos.
"Da mucha pena, es muy fácil generalizar y meter a todo un barrio en el lote sin conocer toda la gente buena que hay aquí trabajando, luchando por su familia o desviviéndose por los demás", expresa a lavozdelsur.es.
"A la gente que está trabajando y luchando por tener un barrio distinto, estas cosas les hace mucho daño", lamenta el sacerdote, que ha querido trasladar ánimos al barrio.
María Antonia, una religiosa de Jesús María, también ha mostrado su rechazo a este aluvión de odio. Ella vive en las Tres Mil Viviendas y colabora con el proyecto Mujer de Cáritas. "Entre los vecinos hay un dolor enorme por la durísima generalización que se hace de todos los habitantes del Polígono por igual. El sentimiento de abandono por parte de la Administración pública es enorme. Son miles de personas con dignidad las que habitan aquí, pero la impunidad que experimentan, ante tanto delito, les lleva a una inseguridad que rompe sus vidas", ha compartido con el consejo parroquial este domingo.
"La violencia no es el camino"
Desde las redes sociales de la parroquia de los Salesianos Jesús Obrero, se ha emitido un comunicado con palabras que buscan arrojar luz en estos momentos de oscuridad.
"Anoche, nuestro barrio fue sacudido por un hecho lamentable. Gracias a Dios, todos estamos bien, y aunque el miedo y la preocupación nos invaden, nos mantenemos firmes en nuestra fe y en la esperanza de que otra vida es posible", sostiene el comunicado.
"Somos hijos de Dios, creados a su imagen (Génesis, 1, 27) , y, por eso, merecemos vivir en paz y justicia. Cada vida tiene un valor sagrado. Hoy pedimos a quienes nos protegen que cuiden más de nuestra gente, especialmente de los más vulnerables", expresa.
Entre algunas referencias bíblicas, la parroquia afirma que "la violencia no es el camino. Solo con amor, diálogo y justicia, construiremos un futuro lleno de paz".
"Gracias de corazón a todos aquellos que han expresado su preocupación y apoyo. Pedimos a Dios que siga cuidando de nosotros y de nuestras familias, y oramos para que pronto podamos vivir en una ciudad libre de violencia y llena de paz", ha finalizado.