Este martes ha tenido lugar en Sevilla una reunión entre Endesa, Junta de Andalucía, Ayuntamiento de Sevilla y representantes de la Coordinadora de Entidades Unidas de Cerro-Amate (con 47 organizaciones) de los barrios para abordar la situación de apagones que llevan sufriendo varias zonas de la capital hispalense durante varios años. En concreto, el encuentro se celebró en el edificio que la Junta de Andalucía tiene en Los Bermejales.
Es el primer encuentro que las asociaciones vecinales tienen con la eléctrica.También es la primera vez en la que están presentes todas las partes implicadas en el problema que pone en jaque a miles de sevillanos durante los doce meses del año, especialmente en verano e invierno cuando las temperaturas llegan a ser insoportables sin aire o calefacción. La Coordinadora reporta a la Junta semanalmente ciento de incidencias.
A dicha reunión asistieron tres personas de la compañía, entre las que se encontraba Víctor Bazaga, director provincial de Endesa; el jefe del servicio técnico, Javier Gutiérrez Calderón y el delegado provincial de política industrial y energía, Antonio Ramírez, como representantes de la Junta; y Pepe Lugo por parte del Ayuntamiento, delegado del distrito Cerro-Amate, junto al nuevo director del distrito Cerro Amate, Patricio León. Además de la representación de la Coordinadora de entidades unidas.
Este encuentro parecía "inalcanzable", según expresan algunos de los asistentes a lavozdelsur.es. La consigna era clara. "La situación de los días 26, 27 y 28 de junio no se puede volver a repetir". Aquellos días Sevilla sufrió unas temperaturas extremas de más de 40 grados que coincidió con un apagón generalizado en las zonas habituales. También se sumaron otras menos frecuentes como la calle Arroyo. En definitiva, hubo miles de personas que se quedaron sin aire acondicionado ni ventiladores por la falta del suministro de Endesa.
Los vecinos han logrado que las tres partes allí presentes se hayan comprometido a diferentes cuestiones que impidan que este tipo de situaciones se vuelvan a repetir, más aún ahora que se han unido a las protestas barrios que no estaban inicialmente ya que han comenzado a sufrir cortes de forma asidua.
La reunión partía de un compromiso anterior del Gobierno de Juanma Moreno. La Junta había acordado realizar una auditoría externa en todo el distrito. Este estudio lo realizará Applus a través del análisis de 56 centros de transformación en Sevilla, 17 de ellos situados en Cerro-Amate. Contará con tres fases: la inspección de los centros de transofmración, la inspección de líneas de media y baja tensión y la inspección de los cuadros. También se van a instalar analizadores de red para monitorizar las estaciones. Algo que ya ocurre en el transformador de Padre Pío.
Los compromisos de los presentes
Lo más relevante de la reunión fueron los compromisos que adquirieron las diferentes partes. Empezando por Endesa, que ya ha comenzado algunos trabajos de refuerzo en las líneas y se ha comprometido a seguir mejorando la instalación eléctrica en estos barrios con nuevas líneas en Padre Pío, bifurcaciones en Candelaria, un cableado nuevo en Su Eminencia o dos nuevas líneas del transformador de Ortega y Gasset para abastecer otras calles tras la instalación de otros transformadores que provocaban su saturación.
Los vecinos, además de la cuestión material, también solicitaron a la compañía que dejase de estigmatizar a los barrios ya que Endesa siempre alude a los "enganches" y las "plantaciones". "Estamos así porque las administraciones nos han tenido olvidados".
Por su parte, la Junta de Andalucía ha prometido agilizar todos los trámites y permisos necesarios para mejorar la instalación eléctrica, así como a vigilar las inversiones y obras que no se han terminado. También existe el compromiso de la administración para que la auditoría se haga lo antes posible. Por último, el nuevo gobierno municipal coordinará las acciones de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado con la subdelegación del Gobierno para aumentar la seguridad.
Una de las reclamaciones de los vecinos es que en caso de que se produzcan apagones durante nuevas olas de calor, el Ayuntamiento movilice a la policía y la protección civil para que acuda a los barrios con agua o generadores alógenos, "tienen que hacer todo lo posible para que los vecinos dejen de sufrir esto".
Esta no será la última reunión ya que las partes se han emplazado a nuevos encuentros en las próximas semanas. Los representantes vecinales esperan que ya puedan asistir miembros de la subdelegación del Gobierno para hablar del papel de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado una vez que el panorama quede aclarado tras la cita electoral.
Comentarios