Estudiantes de la Universidad de Sevilla acampan en apoyo a Palestina entre tensiones con el Rectorado

Tanto los alumnos y alumnas de la Universidad de Sevilla como de la Universidad Pablo de Olavide han decidido acampar este lunes, uniéndose así a un movimiento que ya es internacional

La acampada en el Rectorado de la Universidad de Sevilla.

Este lunes, estudiantes de la Universidad de Sevilla se han sumado a la oleada de acampadas de universitarios que ya recorre todo el mundo en apoyo al pueblo palestino. Tras una asamblea en la que han decidido esta acción, los alumnos han acampado en los jardines frente al Rectorado, saltándose el cordón de seguridad colocado a tal efecto. 

"Hemos tenido que saltarnos un cordón de seguridad porque el Rectorado nos quería confinar en una zona sin sombra y quería identificarnos a todos en el acceso. Mañana convocaremos una concentración para pedir que nos abra la puerta principal, porque ahora mismo estamos casi incomunicados", explica D.E.M., portavoz de la coordinadora de estudiantes para la acampada en la Universidad de Sevilla.

Los estudiantes se han saltado el cordón de seguridad impuesto por la institución.  MAURI BUHIGAS

Estas fuentes estudiantiles explican a lavozdelsur.es que pasarán la noche allí, "intentando organizarnos y a luchar como se pueda".

El pasado viernes, la Universidad de Sevilla cerraba el interior del rectorado para evitar que los estudiantes celebrasen una asamblea en su interior. Cuando el grupo de trabajo PalestinUS, formado por docentes y estudiantes, iba a reunirse para decidir si se unían al movimiento de acampadas que estaba sucediéndose en diversas ciudades del país, se encontró con ese espacio cerrado. La reunión también estaba abierta a personas de la Universidad Pablo de Olavide y de otros centros educativos de la ciudad.

Esto sucedía tan solo un día después de que la misma universidad suscribiese un comunicado de la Conferencia de Rectores de España en el que se pedía el cese del asedio israelí sobre la Franja de Gaza y, en el ámbito académico, se comprometían a revisar y suspender, si se diera el caso, convenios de colaboración con universidades israelíes.

La bandera palestina ondea ante el Rectorado de la US.  MAURI BUHIGAS
Un momento de la asamblea previa a la acampada, este lunes en la Universidad de Sevilla. MAURI BUHIGAS

Tras este acto por parte de la Universidad de Sevilla, las tensiones entre la comunidad de estudiantes y la dirección han ido en aumento, según explican a lavozdelsur.es fuentes estudiantiles. Desde la misma coordinadora de estudiantes para la acampada en la Universidad de Sevilla explican que "el Rectorado no se muestra colaborador" ante el establecimiento de una acampada en el campus. En la mañana de este lunes, el Rectorado era, según la coordinadora, "una fortaleza, está lleno de guardias de seguridad, están cerradas prácticamente todas las puertas, y la situación está muy tensa", explicaban unas horas antes del inicio de la asamblea. No obstante, los universitarios han decidido seguir adelante con la acampada, y sus previsiones en la mañana de este lunes estimaban congregar a unas 300-400 personas.

El lugar de acampada en la Universidad de Sevilla.  MAURI BUHIGAS

Desde la Universidad Pablo de Olavide, por su parte, celebraron este mismo lunes una asamblea para decidir si se sumaban a la iniciativa, si hacían una acampada propia o si se sumaban a la de los estudiantes de la Universidad de Sevilla. Tras cuatro horas de asamblea, decidieron acampar finalmente en su propio campus, entre los pabellones 37 y 38, cerca del metro, según confirmaba a este medio la portavoz de la coordinadora estudiantil de esta universidad, Sofía Echeverría.

Los estudiantes acampados en la US, por lo pronto, se quedarán a pasar la noche.  MAURI BUHIGAS

En otras ciudades andaluzas, esta iniciativa persiste. En la Universidad de Granada aún se mantiene la acampada establecida el pasado miércoles, la primera de las comunidades estudiantiles andaluzas en sumarse a este movimiento. También los estudiantes de la Universidad de Málaga perseveran con su encierro, en esta ocasión en la Biblioteca General, pese a que desde la UMA se ha intentado trasladar la acampada a otro punto del centro. 

Continúan también en la Universidad Complutense de Madrid, en A Coruña, en Zaragoza, en Barcelona... Valencia fue la primera en sumarse, y también persisten los estudiantes acampados allí.