La noche del domingo 15 de octubre habían pasado más de 80 horas desde que por última vez se tuviera noticia de Álvaro Prieto. La Policía y la UME, en colaboración con otros cuerpos, rastrearon desde las nueve de la noche hasta más allá de las once, en plena noche, alguna pista para dar con el joven cordobés. El epicentro de la búsqueda estaba en las cocheras de Renfe, junto al puente de Carretera de Carmona, en la trasera de un McDonald's y con muchísimo paso de vehículos. Una zona habitada donde, de casualidad, ha surgido la evidencia.
Dos reporteros de TVE, como podría haber sido cualquier otra tele, grababan el entorno por donde este domingo buscaban los agentes en la oscuridad. En un tren, entre dos vagones, que llevaba desde agosto en reparación tras un choque con un tractor, aparecían unas piernas que eran captadas por TVE. Justo en ese momento acababan de poner en marcha el tren. Al parecer, para inspeccionarlo en el interior del recinto de Santa Justa, que en línea recta por las vías se encuentra a un kilómetro, y casi dos kilómetros a pie por alrededor, desde la avenida Kansas City.
El testimonio a la Policía de un vecino, que había visto a un chico joven saltar hacia las vías del tren a la altura de las cocheras, fue clave para la inspección de la zona el domingo. No iba mal encaminada la pista. Pero es posible que, al ponerse en funcionamiento el tren este mismo lunes, fuera cuando, de alguna forma, se hiciera visible el cuerpo de Álvaro.
La autopsia, a mediodía de este lunes, aún no se ha realizado, pero una posibilidad es que el joven perdiera la vida electrocutado, una más de varias hipótesis. Ni esta zona ni casi cualquier otra por la que circula un tren, por mucho que sea en ciudad, es susceptible de una vigilancia completa. Sí hay presencia en cocheras, pero los trayectos de tren suponen kilómetros y kilómetros de vías, por lo que cualquier pista sobre su hallazgo en ese entorno de Carretera de Carmona pasaba por el testimonio de vecinos, no de vigilantes.
TVE tomó la decisión de emitir las imágenes que habían captado sus reporteros minutos antes. Una decisión de la que luego el programa Mañaneros, presentado por Jaime Cantizano, se ha retractado, pidiendo disculpas a la audiencia por mostrar los pies del joven.
Igual que el domingo, desde las doce y media de la mañana se han arremolinado vecinos y periodistas alrededor del puente de Carretera de Carmona. "¿Han encontrado al chaval?", preguntaba una persona que cruzaba, por ejemplo, tras hacer su compra en un supermercado muy cerca. Otro veía una cámara y avisaba: "Sí, sí, han encontrado al chaval".
La confirmación se fue haciendo esperar. Y, de hecho, se ha producido de forma oficiosa. Actualmente, está decretado el secreto de sumario y alrededor de las dos y media de la tarde no se ha producido el levantamiento del cadáver. Una situación compleja, porque tanto Renfe como el Córdoba CF –donde jugaba Álvaro– como el propio presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, han confirmado la noticia en redes sociales. El delegado del Gobierno en Andalucía no ha dado más detalles sobre la investigación. Se limitó, mientras se realizaban las pesquisas sobre el terreno, a decir que todo apuntaba a que se trataba de Álvaro.
Se trata de una situación dolorosa que sigue generando muchas preguntas. Renfe ha informado de que en todo momento ha trabajado para facilitar la investigación. La pregunta primera es por qué un chico que pierde un tren, por mucho que se quedara sin batería y sin dinero, no buscó otro remedio más allá de intentar colarse en el siguiente tren –algo difícil en AVE, porque hay control antes de bajar al andén, razón, al parecer, por lo que de primeras intentó cruzar desde otra vía de Santa Justa–. Y la pregunta es qué llevó al chico a tratar por todos los medios de montarse en un tren desde las cocheras. Por qué saltó hacia ellas. Igualmente, aunque sea un lugar común, la Policía ha informado de que todas las hipótesis están abiertas.
Los mismos vehículos de la UME circulaban por los alrededores de las vías de Santa Justa, donde se han producido lógicamente retrasos desde el final de la mañana. Agentes de Policía Local custodiaban la entrada a cocheras. La Policía Nacional tomó por ambos sentidos el puente, incluso montados a caballo para impedir que se tomaran imágenes desde un descampado cercano. A la espera de confirmaciones y de que la investigación arroje luz, este mediodía del lunes 16 de octubre, el primero nublado en mucho tiempo, era el fin de una pesadilla, la de la búsqueda de Álvaro Prieto, y el comienzo de otra, la del dolor de familia, amigos y tanta gente movilizada en los últimos días para dar con el joven cordobés. En Carretera de Carmona había mucho de fin de la historia.