El hábito de fumar es uno de los más antiguos de la humanidad, sin embargo, con la llegada de la ciencia y el descubrimiento de las diferentes patologías que derivan de esta costumbre, la sociedad empezó a tomar consciencia del uso del cigarrillo analógico, pero ya era demasiado tarde, la adicción pasó a formar parte de la vida de muchos. No obstante, desde la llegada de los e-cigarrillos la historia se ha convertido en otra, y es que estos dispositivos han traído esperanza para aquellos que desean mejorar su estilo de vida y dar el primer paso para alejarse de la nicotina. Hoy en día, el cigarrillo electrónico Terpy es uno de los más cotizados por quienes desean formar parte de este equipo, donde no hay cabida para la combustión ni el humo de tabaco, además se puede o no incluir nicotina por lo que resulta una estrategia muy acertada para quienes desean alejarse progresivamente del hábito del tabaco.
Generaciones de cigarrillos electrónicos
La historia de los cigarrillos electrónicos es muy peculiar, pues en los años 60 se creó el primer dispositivo de vapor que integraba sabor y en el cual no se incluía la nicotina; no obstante, esta creación causó poco impacto en una sociedad que ya había hecho del cigarrillo clásico un estilo de vida y que desconocía de los efectos nocivos de su uso a corto y largo plazo. La idea fue retomada en el 2003 en China y desde entonces ha tenido un éxito contundente; claro está, aún quedan temas que son discutidos pero la ventaja sobre el formato tradicional ha sido aceptada con certeza.
Ahora bien, a pesar que desde el comienzo los cigarrillos electrónicos se distinguen por ser dispositivos tecnológicos, con el paso del tiempo se han incluido mejoras que permiten potenciar las experiencias sensoriales de los usuarios. Es así como la industria del vapeo se ha propuesto ir más allá de las expectativas del mercado actual dando paso a diferentes generaciones de cigarrillos electrónicos.
Primera generación: e-cigarrillos Mini
La primera generación de cigarrillos electrónicos debutó con los Mini, que resultaron ser una versión muy cercana a los cigarrillos clásicos desde el punto de vista estético por lo que cautivó rápidamente la atención de los fumadores asiduos. La intención de este formato era ganar confianza en el mercado a fin de que los usuarios pudieran adaptarse con facilidad al sistema sin alejarse por completo de la sensación original del cigarrillo analógico. El mecanismo consiste en un cilindro muy delgado que funciona con una batería recargable convirtiendo el líquido en vapor, y a pesar de ser la primera generación de cigarrillos electrónicos, hoy en día muchos aún apuestan por este diseño aunque no sea uno de los más funcionales a la hora de vapear.
Segunda generación: Vape pens
Ante la idea de ir más allá de las expectativas de los usuarios, la industria del vapeo decidió incorporar una serie de mejoras a la clasificación anterior, es así como nacen los Vape Pens o cigarrillos electrónicos de segunda generación. Se caracterizan por tener una dimensión mediana, en comparación a los Mini e incorporan una batería de mayor capacidad así como otras prestaciones que optimizan su rendimiento en el vapeo. Su nombre deriva de la similitud que tienen con los bolígrafos convencionales, por lo que se ajustan muy bien a la demanda de fumadores asiduos o novatos.
Tercera generación: Mods
Las últimas actualizaciones en cigarrillos electrónicos ofrecen mayor comodidad al usuario y es que la tercera generación presumen de diseños exclusivos donde se deja ver el modernismo, además de diversas prestaciones automatizadas que permiten al usuario tener todo el control del vapeo gracias a la presencia de indicadores digitales para la temperatura y otras funciones que pudieran considerarse exclusivas de esta gama. Pese a todas sus cualidades, es preciso hacer énfasis en que esta generación no resulta la más apropiada para los vapeadores novatos, pues supone una mayor curva de aprendizaje, además su coste es más alto; sin embargo, va en consonancia con todo lo que ofrece.
Si es la primera vez que te acercas al mundo de los cigarrillos electrónicos, debes saber que lo mejor es apostar por los dispositivos básicos o sencillos llamados kit de principiantes. Estos vienen equipados con todos los elementos de cara a ofrecerte una experiencia intuitiva y sencilla para que puedas familiarizarte con el sistema; en cuanto al liquido de vapeo, es necesario que pruebes los sabores que más te llamen la atención y saques tus conclusiones, así podrás crear tu propia experiencia y darle vida a la combinación de líquidos que puedan satisfacer tus expectativas. De igual forma, es importante fijarse en la credibilidad de la marca tanto del e-líquid como del cigarrillo electrónico, pues dado al auge creciente de estos dispositivos, existen muchas empresas clandestinas en el mercado actual; estos detalles permitirán optimizar cada la experiencia del vapeo y tener garantía de comprar un dispositivo de calidad.