Juan José, con apenas ocho años, se apuntó a la banda de música de su pueblo. “Me llamó la atención y quise probar”, cuenta, mostrando un amor por la música que no ha heredado de ningún miembro de su familia. Sus padres son trabajadores de la piel, un material al que llevan dedicada toda su vida, en Ubrique, naturalmente. En la pequeña localidad serrana inició luego su formación, cursando un grado elemental de saxofón, aunque luego dio el salto al Conservatorio Profesional de Música Joaquín Villatoro de Jerez, hasta donde se desplazaba varias veces en semana.
“El destino ha querido que ahora tenga mi negocio justo enfrente”, cuenta Juan José Prieto (Ubrique, 1987), propietario de Prieto Música, una tienda especializada en la venta de instrumentos musicales y accesorios profesionales y de principiantes. “Me tiré a la piscina sin nada”, cuenta el joven ubriqueño, que contó con la ayuda de su familia para poder abrir el establecimiento. “Me apoyaron económicamente mis padres, mis hermanos, mis tíos, mi abuela…”, enumera. Así abrió las puertas su tienda a finales de 2016, aunque a mediados de 2018 se trasladó a un local más grande.
“Nos hace mucho daño internet”, confiesa Juan José, quien señala que “la forma de competir con las tiendas online es teniendo material en la tienda y dando buen servicio”. Eso lo lleva a gala. Por eso tiene clientes, no solo de Jerez, sino de localidades de toda la provincia de Cádiz y también de Sevilla. “No quiero vender y olvidarme del cliente, luego les digo que vengan para cualquier consulta, para ajustar el instrumento, damos un servicio integral”, cuenta.
Juan José, que trabajó durante ocho años en una tienda especializada en instrumentos musicales antes de montar la suya propia, tenía claro que su vida giraría en torno a la música. Al terminar bachiller, estudió Magisterio Musical, hasta que le llegó la oportunidad de desarrollar su pasión en un establecimiento dedicado a la música. “Mi padre me decía: no quiero esto para ti —en referencia a la artesanía de la piel— y eso se me quedó grabado a fuego”, confiesa. “Siempre me ha gustado estar de cara al público y hacer cosas nuevas”, de ahí que su vena emprendedora dura sus frutos más temprano que tarde.
Prieto Música, cuenta su propietario, vende sobre todo instrumentos relacionados con el flamenco. “Guitarras, cajones y castañuelas tienen mucha salida”, señala Juan José, aunque también se venden instrumentos de viento y muchos pianos, y desde hace un tiempo, bastantes ukeleles. "Hay un boom", comenta. Pero también tienen peticiones más exóticas, como instrumentos étnicos de países africanos o del este de Europa. “Una vez nos pidieron un didgeridoo —un instrumento de viento originario de Australia— y en otra ocasión un duduk de Armenia”, señala. “Conseguimos lo que nos piden”, dice orgulloso.
La tienda cuenta con dos empleados, además de Juan José, algo que le llena de orgullo. "Mi mayor satisfacción es crear trabajo", dice el propietario de Prieto Música. "Para mí que vengo de una familia humilde es lo más grande", señala, máxime cuando lo hace en una ciudad que ha incrementado su lista del paro en 859 personas durante el mes de octubre, sumando 27.209 desempleados, 896 menos que hace un año. La provincia de Cádiz en su conjunto suma 6.736 parados en octubre, situándose en 146.204 desempleados, que supone 5.830 menos que hace doce meses.