Todo son facilidades para las personas que se suben al carro del renting de coches. Son muchas las familias que optan por no comprar un vehículo para siempre. Prefieren elegir un modelo en función de las necesidades que tengan en determinados momentos de sus vidas. Esta alternativa presenta multitud de ventajas que repercuten en la rutina favorablemente. Los conductores tan solo tienen que preocuparse por pagar el combustible y no pasarse del número de kilómetros permitidos para no tener que abonar una penalización.
En el pago mensual de este servicio aparecen incluidos todos los gastos del coche, desde seguro a todo riesgo sin franquicia, reparaciones, ITV, mantenimiento e incluso varios cambios de neumáticos incluidos. El papeleo y las fianzas quedan atrás y las averías ya no son un problema. Además, incorpora asesoramiento totalmente gratuito a lo largo de todo el proceso de contratación para elejir el plan ideal según las necesidades y el presupuesto.
Con el renting, es posible estrenar coche nuevo cada muy pocos años y, además, con la última tecnología del mercado, siempre en función de lo que deseen contratar los conductores. Se puede elegir la marca y el tipo de vehículo tanto deportivos como berlinas o furgonetas y de gasolina, diésel, híbridos o eléctricos.
La posibilidad de financiación es beneficiosa para empresas, autónomos y particulares. Concretamente, para los dos primeros colectivos, estos pueden pueden desgravarse las cuotas del renting en la declaración del IVA, IRPF y, en caso de las empresas, el impuestos de sociedades. Además, tienen una mayor flexibilidad a la hora de gestionar el resto de operaciones de sus negocios.
En cuanto a los particulares, este método es ideal para olvidar las preocupaciones que sí tienen los conductores que se han comprado vehículos propios. La primera de todas es el mantenimiento, que no supondrá un gasto extra porque ya está incluido en la cuota mensual.
Si se opta por un coche de renting no habrá que desplazarse para pasar la ITV cada año, una vez cumplidos los cuatro ni tampoco habrá que calentarse la cabeza comparando los seguros de coches para escoger la opción más barata. También conlleva ahorrarse los impuestos de matriculación o de transmisiones.
La compra de un vehículo implica pagar una entrada, pero, el contrato de este servicio no requiere este desembolso inicial. Asimismo, la cuota mensual también incluye un coche de sustitución para cuando ocurran averías inesperadas.
Las personas dispondrán de hasta tres cambios de neumáticos completos, siempre y cuando se deba al desgaste, y de asistencia en la carretera ante cualquier percance. Otro de los motivos por los que el renting es una buena opción es la libertad que aporta. Si apetece cambiar de coche, no hay que venderlo, simplemente devolverlo y seleccionar el modelo que más convenga.
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