Blanca Flores: "La complejidad de la provincia de Cádiz es una barbaridad. No hay otra igual"

¿Cómo vive una persona vinculada a la cultura y la educación una tarea tan compleja como la Subdelegación del Gobierno?
Mi trayectoria ha estado vinculada a la educación y a la cultura, pero también al compromiso sindical, al feminismo. No es algo nuevo entonces. Llevo bastantes en la trastienda de la política y en ocasiones, no tan en la trastienda. He trabajado con grupos sectoriales, orgánicamente, he pertenecido a ejecutivas. Independientemente del sector de la educación, mi trayectoria ha sido bastante diversa. He participado en programas de sanidad, medio ambiente, plurilingüismo, inspección, prevención de riesgos laborales. En educación he participado en estructuras de edificios educativos y planificación preventiva, evacuación y emergencia. Por lo tanto, tampoco ha sido un cambio muy drástico. Además, he tenido responsabilidades en el Comité de de Salud o en la Comisión de Protección de Menores, en absentismo o acoso laboral. Mi trayectoria, aunque ha estado más vinculada profesionalmente a lo educativo, ha sido variopinta y diversa.

¿Su condición de mujer y feminista marca también esta etapa frente a la Subdelegación?
Soy la primera socialista que ocupa la Subdelegación del Gobierno en la provincia de Cádiz. Hubo una mujer del PP, hace mucho tiempo, durante un periodo corto. Aunque han sido ya algunas mujeres las que nos han abierto camino a otras. Hemos tenido referentes mujeres que han ido por delante de nosotras, muy pocas. Yo pertenezco ya a una generación donde el compromiso es reivindicar en el día a día. Aquí se me da la oportunidad de visibilizar el papel de la mujer. Hace poco celebramos un 8 de marzo en clave feminista y queremos fomentar actos en los que se destaque la presencia de la mujer, por ejemplo, los cuerpos y fuerzas de Seguridad del Estado. También acabamos de presentar los puntos violeta en la Universidad de Cádiz.

"Aterrizo con la tragedia de Barbate. Eso marca"

Ese afán de apertura y cercanía debe ser complejo porque, en buena parte, la Subdelegación del Gobierno representa para los ciudadanos al Ministerio del Interior, a los cuerpos de seguridad, a la autoridad estatal en su máxima expresión.
El día de la libertad de prensa, que fue el mes pasado, nos visitaron mujeres del mundo de la cultura. Cada mes hacemos un día de puertas abiertas a la ciudadanía. En marzo estuvo dedicado a la mujer. En abril, en torno al Día del Libro, con mujeres escritoras de teatro, novela y poesía. También queremos visibilizar que tenemos directoras, como la responsable provincial de Tráfico, con la que hemos trabajado toda la coordinación del corte de Puente Carranza. También tenemos una directora provincial del SEPE, el servicio de empleo. Hay una voluntad de mantener todo lo bueno que se hizo antes. No pierdo de vista a mi compañero y antecesor José Pacheco. Le tocó una época dura, toda la gestión de la pandemia. Una etapa que marcó a todo el mundo. Un antes y un después. Evidentemente hizo muy buen trabajo y lo que tengo que hacer es continuar todas esas líneas de trabajo que él abrió. También quiero darle a esta etapa mi impronta, no tanto por ser mujer como de proceder de mundo sociocultural y humanístico. Me gustaría avanzar en cercanía y apertura a la ciudadanía. Aquí, en la Subdelegación, somos gente trabajando para la gente.

Ni un mes llevaba en el cargo cuando, el 9 de febrero, una narcolancha mata a dos guardias civiles en el puerto de Barbate. Ninguna tragedia podía explicar mejor la complejidad del encargo que ha recibido como subdelegada
Aterrizo con la tragedia de Barbate. Eso marca. Yo creo que el tratamiento de todo lo relacionado con el narcotráfico no debe hacerse solamente desde esta provincia. Es un conflicto de toda Andalucía. Mediáticamente se ha explotado mucho el asunto, desgraciadamente. En la provincia de Cádiz no todo es narcotráfico. Esta tierra tiene muchos puntos fuertes, muchas fortalezas, muchas bondades y muchas oportunidades.

¿Está en desacuerdo con el tratamiento público, con la imagen, que se ha dado de la provincia a partir de los sucesos del 9 de febrero en Barbate?
No es que discrepe. Es que creo que es un error focalizar tanto esa problemática en nuestra provincia. El narcotráfico es un problema endémico y es internacional. Se da en las costas de Cádiz como en Portugal y en Amberes, en Hamburgo y en Rotterdam, en todos los puertos y en todas las zonas litorales. Y no solo en Europa, en el mundo entero. Por aquella tragedia del 9 de febrero, todos los programas son en torno a las narcolanchas, alrededor de Barbate, del Campo de Gibraltar. La verdad es que duele porque hay muchas cosas de nuestra provincia que no se ponen de manifiesto. Pues la verdad es que duele, no va a doler.

¿Esa sensación de injusticia por el estigma que sufre la provincia es compatible con la creencia de que el narcotráfico se ha vuelto más violento? Incluso se ha mencionado el término narcoterrorismo
No comparto ese término. Han cambiado las operativas, los cuerpos y fuerzas de seguridad están trabajando de otra forma y está llegando menos droga a las costas. Se está aprehendiendo mucho en alta mar. De hecho, la presión que se ha hecho en el Campo de Gibraltar. Ha desviado parte de lo que entraba a otras rutas. Ahora se intercepta mucho más en cargueros y grandes embarcaciones, a muchas millas de tierra firme. El Plan Especial de Seguridad del Campo de Gibraltar, aunque mantiene ese nombre, abarca toda la costa de la provincia, desde desde el Guadalquivir hasta hasta La Línea. Es más, se extiende por toda la costa andaluza, hasta los límites con el Algarve y Murcia. En esta lucha, la colaboración internacional es imprescindible y constante. Esa coordinación y ese trabajo conjunto tiene los mismos objetivos y se han implementado muchísimos recursos humanos y materiales.

La principal queja de los colectivos dentro de la Guardia Civil es precisamente contraria a esa afirmación suya. Dicen los agentes que faltan recursos humanos y materiales en la lucha contra el narcotráfico
Los catálogos de dotación de recursos humanos en la plantilla tanto de Policía Nacional como de Guardia Civil están al 90% en la provincia de Cádiz. Están más cubiertos que en ninguna otra parte de España. Y no solamente están cubiertos por lo que corresponde al catálogo. Cuando hay eventos o determinadas actuaciones ya previstas, vienen efectivos en comisión de servicio.

¿Niega que una zona como la provincia de Cádiz tenga falta de efectivos en Guardia Civil o Policía?
Es innegable que por estar situada donde está, Cádiz es la provincia más compleja de España pero es la segunda con mayor número de funcionarios después de Madrid. Eso no se da solo por los cuerpos de seguridad del Estado, también por todos los servicios integrados a la Subdelegación, como Agricultura y Pesca, Sanidad, Exterior y Trabajo, incluso la Agencia Tributaria. Es la única provincia que tiene tres capitanías, Tiene además dos comandancias. Seis comarcas muy delimitadas, con cuatro campus universitarios, tres cámaras de comercio, con trabajadores transfronterizos. Tenemos Marruecos a 13 kilómetros y frontera terrestre con Reino Unido. Frontera con los norteamericanos en Rota. Tenemos la costa más amplia de Andalucía, oceánica y mediterránea.

¿Son las servidumbres de ser frontera?
Pero no solamente frontera con otro país, es frontera de continente. Por lo tanto, la complejidad de esta provincia es una barbaridad. No hay otra igual en España.

¿La diversidad territorial, social y económica es una dificultad añadida?
Tiene todos los tipos de territorio. Hasta la Sierra, con unas características que ahora permiten mucho aprovechamiento del turismo rural. También un sector agrícola castigado, como el de la pesca. Una zona industrial muy importante en el Campo de Gibraltar en la que se está implicando muchísimo varios ministerios, especialmente en la conexión, en infraestructura y transportes. El reto es renovar las industrias que hay allí, que las térmicas se conviertan al hidrógeno verde a través de millones de inversión pública de este Gobierno. También se han hecho inversiones para paliar los efectos de la sequía en Doñana.

Usted representa a un gobierno que está logrando importantes avances en economía y empleo, con un alto crecimiento sostenido y los menores niveles de paro en más de 15 años. Sin embargo, encuentra mucha contestación social, mucho rechazo ¿Qué parte están haciendo mal?
Hay protestas y hay reivindicación y así debe ser. Siempre que  algo va mal se protesta y ese gesto es visible. El bienestar, en cambio, no hace ruido, no trasciende. Es muy notable la ayuda en empleo agrario. La inversión en Navantia es increíble. También en Airbus recientemente. La labor del Ministerio de Transición Ecológica en el Campo de Gibraltar para la transformación de las térmicas, para que no cierren, para que se conviertan. También están en marcha programas de empleo joven y la oferta de empleo público está a unos niveles que no se veían en muchísimio años. Pero cuando va bien, pues ya está, vamos adelante y no se ve ni se oye.

¿Qué papel tiene la Subdelegación del Gobierno en esas inversiones estatales?
Tiene dos papeles. Por un lado, llegar a todos los municipios de la provincia. Me tengo que hacer eco de ellos, qué pasa, cómo están, cuáles son sus problemáticas, sus demandas y hacérselas llegar a los distintos ministerios. Por otra parte, es mi obligación llevar a esos territorios todas las inversiones y las políticas que vienen de un ministerio. Subdelegación no es solamente las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado pero muchos ministerios tienen un trabajo que parece invisible porque trabajan en intangible, en bonos sociales, el ingreso mínimo vital, becas, en proyectos de mejoras de infraestructuras que hacen más fácil la vida de la gente. Pero eso no se ve. Siempre es más visible la protesta. Somos un poco tremendistas. Cuando se iba a cortar puente parecía que se iba a acabar mundo, que de Cádiz nadie iba a poder entrar o salir, ciudad sitiada.

¿Y marcha razonablemente bien el primer cierre total de un puente, durante varios meses, desde que se inauguraron los dos que tiene Cádiz?
Iba a venir el fin del mundo. El asunto, en los días previos, se había monopolizado un poco por parte de uno de los ayuntamientos afectados, cuando afecta a muchos municipios. Había que contar con muchas instituciones, con muchos agentes implicados, de bomberos y ambulancias a los astilleros de Navantia, el transporte público. Nunca nos habíamos enfrentado a una situación igual pero contábamos con la ventaja de que tenemos un nuevo puente desde 2015, con dos carriles de entrada y dos de salida, que no teníamos antes. Había que poner un poco de voluntad y la lealtad institucional. Con más cogobernanza le iría mejor a este país.

Tres Caminos: "Es un gran proyecto. Sólo la fase previa de acondicionamiento supone 95 millones de euros de inversión de este gobierno"

¿No encontró cogobernanza en los planes para paliar el cierre del puente Carranza en marzo?
Digamos que hay que estar haciendo una llamada de atención a la cogobernanza con frecuencia, llamando a la lealtad institucional y a la coordinación demasiadas veces. Cuando es evidente que así las cosas salen. A todos los representantes políticos nos une el objetivo de mejorar la vida de los ciudadanos con los que convivimos. Ganamos todos.

¿Cómo van la obra del puente y los plazos de reapertura anunciados para mediados de julio?
Las partes más complejas están todas solventadas. Incluso están en fase de asfaltado. Yo estaba confía en que iba a salir bien pero no lo puedes decir. Hay tantos detalles, tantos posibles inconvenientes.

El siguiente episodio de atascos está a la vuelta de la esquina, las obras han empezado en el nudo de Tres Caminos
La semana pasada nos detallaron el proyecto en el Ministerio [muestra el dossier oficial]. Ahora mismo se están haciendo inversiones por parte del Ministerio de Transporte que no tienen precedentes. Habrá molestias, claro, como en todas las obras. Habrá que buscar alternativas y habrá que hacer una llamada a la paciencia y a la conciencia durante dos veranos pero luego va a ser para bien. Es un gran proyecto. Sólo la fase previa de acondicionamiento supone 95 millones de euros de inversión de este gobierno.

¿En verano de 2026 serán historia los atascos crónicos en Tres Caminos?
El proyecto incluye la construcción de tres nuevas estructuras, dos de ellas doble con bastante longitud. Se va a restaurar todo lo que es el entorno y todo el paisaje. La de cantidad de años que tiene esta demanda hace que veamos ya la luz al final del túnel. Esto es maravilloso. Como la inversión que hace Puertos del Estado tanto en Cádiz como en Algeciras. En Algeciras, por fin, habrá una especie de autovía de ferrocarril prácticamente hasta Zaragoza. Los contenedores llegarán desde el puerto hasta Zaragoza, que se van a distribuir por toda Europa. Eso es una barbaridad. Las inversiones en infraestructuras son las más cuantiosas que se han conocido en muchos años.

Otra revolución, o evolución, para el Campo de Gibraltar va a ser el acuerdo con Reino Unido por la colonia, ¿cómo va a impactar a los ciudadanos?
En cierta medida supone normalizar una situación que no está dentro de la normalidad ¿Cuántos trabajadores transfronterizos cruzan diariamente la verja para trabajar y volver a cualquier municipio del Campo de Gibraltar? Son ciudadanos españoles, residentes en el Campo de Gibraltar que trabajan al otro lado de la verja. La convivencia cuestión del día a día y no es lógica la situación actual. Ese acuerdo es una demanda histórica para que desaparezca esa frontera. El ministro ha estado trabajando muchísimo para simplificar esa situación y que se llegue a una prosperidad compartida en la zona, para ambas partes.

Evidentemente, Gibraltar se beneficia pero también hay nuevas oportunidades para todos los municipios y toda la la población del Campo de Gibraltar. Las relaciones personales se han dado siempre por lo que se va a convertir la realidad en normalidad. Será la normalización de la convivencia en la zona. Hay muchos flecos que involucran al Ministerio de Defensa, al de Interior y al de Hacienda. Pero confiamos, desde el Gobierno de España, en que el acuerdo sea un beneficio para esos 300.000 habitantes del Campo de Gibraltar. Son miles de trabajadores, familias que están cruzando diariamente la verja. Además hablamos de un aeropuerto y otras cuestiones muy importantes que ahora están en discusión. Tenemos una oportunidad histórica y el Gobierno de España tiene claro que merece la pena trabajar hasta el final por el acuerdo.