El cerebro tras el ilusionante proyecto de rehabilitación para la vida social, cultural y económica del Cine Jerezano, un equipamiento muy icónico en la memoria sentimental de la ciudad y que lleva un cuarto de siglo en desuso, es Dario Regattieri (1971). Este suizo-alemán, de padres italianos, que iba a su colegio de la zona de los Alpes en trineo, tuvo su primer contacto con la ciudad andaluza nada más licenciarse en Arquitectura en la Universidad Winterthur. "Fue mi primer viaje y aquí hasta puse algunas copas, fue una época oscura (sonríe), no hablaba aún español, pero me sirvió mucho la experiencia".
Aquella especie de Erasmus por su cuenta y riesgo, a principios de los 90 del siglo pasado, le valió para tener claro que iba a radicar su proyecto de vida en Andalucía y que iba a volcarse en el mundo de la comunicación, el marketing y la publicidad, y los eventos corporativos.
Desde su sede en el Aljarafe de Sevilla, fundó y es CEO desde hace más de veinte años de beon.Worldwide. Un grupo empresarial con unos 2.000 empleados (500 de ellos directos) que han trabajado en más de 4.000 proyectos; presente en 50 países (este pasado saltó a Dubai); y con unos 300 premios nacionales e internacionales.
En su ámbito profesional, Regattieri no sale del mantra marketiniano que resume la frase de la escritora y activista por los derechos civiles Maya Angelou: "La gente olvidará lo que dijiste, la gente olvidará lo que hiciste, pero la gente nunca olvidará cómo la hiciste sentir".
"La comunicación emotiva siempre ha sido fundamental para mí"
Y a partir de ese trabajo de comunicación emocional, su multinacional ha ido creando experiencias de marca para grandes corporaciones —este verano será la primera agencia española en organizar un evento en la meca de los eventos, la Sphere de Las Vegas—, pero también diversificando en busca de nuevas oportunidades de negocio. Y aquí es donde entra en juego otra de sus máximas: si ves un mercado saturado, no lo dudes: métete. "Si hay mucha demanda y lo haces mejor y diferente que el resto, métete. Si vas a montar una pizzería hazlo donde haya tres porque la gente sabe que en esa zona se come comida italiana. Van a caer clientes por defecto".
Aquí surgen los musicales de beon.Entertainment y aquí surgen proyectos como los del futuro Teatro Jerezano. "La comunicación emotiva siempre ha sido fundamental para mí. Y por eso creamos hace más de 20 años una empresa que se dedicaba a contar historias de la forma que fuese: publicidad, eventos, puentes emocionales con una marca… ¿por qué compramos un iPhone y no otro teléfono? ¿O por qué tenemos un Mini? Siempre hay una historia detrás y nosotros venimos de ahí. Y esto nos lleva también al teatro. Al pensar en la diversificación de lo que hacíamos en nuestra empresa, vimos cómo estaba el teatro de gran formato, todo con productos importados, de Broadway, West End… y ahí había un mercado muy grande, especialmente en Madrid, la tercera ciudad de mayor potencial para los musicales. Y justo ahí nos metimos".
Sin embargo, el enfoque fue radicalmente diferente a lo que existía. En lugar de importar producciones exitosas a España, como el infatible Rey León o Grease, por qué no crear contenido propio y exportarlo.
Así surgió la idea de El médico, el musical a partir del best seller de Noah Gordon. Convencer al nonagenario escritor para que cediera los derechos de su novela no fue tarea sencilla, pero Regattieri no es de los que lleven bien un 'no' por respuesta. "Como en un primer momento nos dijo que estábamos locos, grabamos una de las canciones y fuimos a Boston a mostrársela. Se puso los cascos y empezó a llorar, dijo que estaba escuchando su novela".
Lo que vino después fue un musical que ha registrado 800 funciones y ha facturado unos 20 millones de euros. "Como aquello funcionó, fuimos a por el segundo musical". Llamaron a María Dueñas y pusieron en marcha El tiempo entre costuras. Y luego vino La historia interminable, de Michel Ende, que el CEO de beon.Worldwide sueña con que sea el espectáculo musical que inaugure el Teatro Jerezano la próxima Navidad. Un año en el que su factoría de entretenimiento también prepara el estreno mundial de Los pilares de la tierra, la obra capital del superventas Ken Follet.
"Hemos tocado lo máximo que podemos tocar en musicales. Tenemos una oficina en Sevilla y estamos produciendo para todo el mundo, no hay límites, vemos la importancia de creer en las cosas y este proyecto parecía increíble", cuenta Regattieri, que ha estado en Jerez hace unos días participando en unas jornadas sobre Nuevas Iniciativas Empresariales en Patrimonio, Artesanía y Cultura, organizadas por la Delegación de Empleo, Trabajo Autónomo, Comercio y Empresa.
Campañas de publicidad, soluciones tecnológicas, producción y diseño de eventos, producciones teatrales... Una fábrica de emociones y experiencias de ocio y entretenimiento que incluso tiene el Premio Max al mejor espectáculo revelación 2021 por el musical Antoine, la historia del Antoine de Saint-Exupéry, creador de El Principito.
Ahora el siguiente paso, y aquí entran en juego proyectos de la multinacional como el Teatro Jerezano, pasa por tener contenedores en los que exhibir todo su contenido propio. "Somos grandes creadores de contenidos, pero cada vez más nos faltan contenedores para ese contenido. Sitios donde se puedan contar esas historias, y si no los hay, los encontramos. Y este es el resultado del antiguo Cine Jerezano", explica un hombre cuya empresa lo mismo llevó a cabo el nuevo pabellón de Andalucía en la feria de turismo Fitur, este pasado enero, que diseñó y produjo el estand de Cisco Systems en la feria Web Summit 2018 de Lisboa.
Galería de fotos | El Cine Jerezano, a las puertas de ser Teatro Jerezano
El proyecto para Jerez y el Jerezano
Nosotros queremos llevar la cultura a todos los espacios posibles en España. Estamos haciendo de forma distinta producciones culturales porque no traemos de fuera los productos, sino que somos creadores de esos productos y los exportamos. Lo demuestra El médico, La historia interminable, El tiempo entre costuras, y el estreno mundial que estamos preparando de Los pilares de la Tierra. Lo que estamos intentando hacer es nuestro propio contenido, y al mismo tiempo ahora estamos creando contenedores para luego exhibir nuestro contenido. Y lo queremos hacer en el norte, en el centro y en el sur. Y entonces, claro, aquí en Jerez, este espacio, el Cine Jerezano, que llevaba casi 25 años cerrado, había que sí o sí devolvérselo a la ciudadanía. Lo hemos hecho en Sevilla, con espacios de la Expo, y aquí cuando vimos esto dije: eso es perfecto para lo que queremos. Estoy seguro de que le va a dar una movilidad a la ciudad muy, muy grande, ya no solo por lo que se cree ahí dentro, sino por todo lo que puede mover a su alrededor.
Es obligatorio que sea así porque estamos hablando de un espacio que nosotros lo vamos a aumentar hasta las mil butacas. Eso significa que será un espacio grande. ¿Qué significa eso? Que podemos traer todo tipo de espectáculos, pero también todo tipo de formaciones, eventos y congresos internacionales. Si nosotros tenemos un contenedor y ese contenedor lo que hace es crear contenido, le da vida a todo lo que le rodea, porque puede ser de ocio, puede ser profesional, puede ser de formación, puede ser de muchísimas cosas. ¿Para qué? Para que pueda tocar muchas disciplinas, instituciones, sociedades distintas, para darle uso la 24 horas, siete días a la semana, y con ello provocar emoción a través del ocio y dinamismo a su alrededor.
"Los grandes directivos ya no tienen que estar físicamente en un despacho, y el sur de Andalucía tiene un buen clima y una buena vida"
Absolutamente. Es más, con el Ayuntamiento hay un puente fantástico, la alcaldesa está muy metida en el proyecto, y al final no olvidemos que el espectáculo, el ocio, es una parte que se trata más en los fines de semana, pero un lunes, martes o miércoles ahí tiene que haber formaciones, congresos nacionales e internacionales.… Y eso conlleva logística, hoteles, caterings, taxis… Eso le dará mucha vida a la ciudad.
En general, el sur de Andalucía está teniendo mucha vida. Claro, Málaga ha sido un motor muy grande. ¿Qué pasa? Cada vez más la gente de fuera aprovecha, disfruta, de lo que tenemos nosotros en el sur de Andalucía, porque antes una empresa estaba muy ligada a un sitio, a un sitio de trabajo, a un puesto, a una silla y a una mesa en un espacio concreto. Después del covid esto se ha roto. Eso significa que todos esos grandes directivos, o esos grandes estrategas, ya no tienen que estar físicamente en Oslo, en Noruega, sentados en un despacho, sino que el sur de Andalucía tiene un buen clima, tiene una buena vida, tiene una buena gastronomía y hace que la gente quiera venir aquí a trabajar porque ya el sitio físico donde está no es tan importante; y eso hace que el sur de Andalucía sea un sitio idóneo para crear, para vivir, y para tener una familia. Eso conlleva que cada vez más empresas están viniendo aquí al sur.
Y eso, teniendo aquí un aeropuerto como el de Jerez, que se podrá potenciar todavía muchísimo más, es fantástico. Todo lo que Jerez tiene alrededor, y encima un aeropuerto, es fantástico, tiene todos los ingredientes. Ahora lo que hay que hacer es dar todo eso a conocer y dar las facilidades, dentro del marco legal, para poder apoyar proyectos. Al final, hay una cosa que tengo clarísima: es como una bola de nieve. Una vez que empieza a rodar, se pone cada vez más nieve alrededor de esa bola de nieve. Eso significa que el dinero llama al dinero o el trabajo llama al trabajo. Porque si tú tienes ya un entorno profesional, ese entorno profesional va a requerir de más profesionales. Y después la ciudad también tiene que estar abierta a recibir, no poner piedras en el camino, sino ayudar y aportar valor a todo lo que viene dentro de un proyecto racional.
Nosotros buscamos siempre lo local, que la gente de alguna forma se sienta identificada; y más en un proyecto cultural, necesitas que la gente se sienta parte de algo, porque al final este espacio puede ser una propiedad de alguien, pero es un bien intangible para toda una comunidad a la que le tiene que servir de plataforma, de escaparate, le tiene que servir de muchísimas cosas y eso significa que la misma ciudadanía de Jerez, en este caso, es parte del proceso.
Estamos intentando llegar. Si es verdad que hay una normativa por ley que hay que cumplir. Al ser un espacio público está expuesto a muchas disciplinas y entes distintos dentro de un ayuntamiento, que lo está poniendo todo. Dentro de todo lo acelerado que podemos ir, respetando la ley, pues estamos dándolo todo para intentar estar en Navidad. Sería el reto, estamos luchando por ello, pero si no es Navidad, será en primavera como muy tarde. Pero estamos luchando por ello, me encantaría inaugurar el espacio en Navidad, una fecha muy buena, muy especial en Jerez.
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