El superalcalde del PP que no sigue argumentarios: "El Puerto lidera las buenas noticias de Cádiz"

Estoy muy satisfecho, pero ciertamente abrumado por el respaldo mayoritario al proyecto de ciudad y a este alcalde. Prácticamente, uno de cada dos votantes se siente representado y confiado conmigo como alcalde, y eso supone una enorme responsabilidad para poder devolver tanto cariño expresado en votos.

"Me tomo la victoria como un préstamo de confianza en que se han hecho las cosas bien"

Se ha hecho historia. Es el mejor resultado del PP en cualquier convocatoria electoral, ya sean generales, autonómicas o municipales. Pero no creo que haya 18.091 militantes del Partido Popular en El Puerto. Me lo tomo como un préstamo de confianza en que se han hecho las cosas bien y la gente quiere que se sigan haciendo bien. Por tanto, asumo con la responsabilidad y el compromiso que significa no tener ya una dificultad en el pleno o incapacidad de formular mayorías. Tenemos ya las manos suficientes, un gobierno amplio, para tomar las decisiones estructurales que necesita el Ayuntamiento para que la ciudad avance más rápido.

Nosotros nos hemos enfrentado con un gobierno en minoría a un ayuntamiento ultra endeudado, con una pandemia de por medio, con una oposición que, de izquierda a derecha, no nos ha dado ni un poco de agua… y a pesar de todo, se han hecho muchas cosas. Me siento con la fuerza, la energía y la ilusión para impulsar el desarrollo definitivo de El Puerto.

¿Trabajaban sobre un resultado así?
Sí. La sociología es una de las cosas que me pierden. Y nosotros tenemos tracking de lo que piensa la gente casi semestrales, y en los últimos tiempos prácticamente eran mensuales. Hemos estado en valoración, en cuanto a la figura del alcalde, por encima del 6,5 durante todo el mandato, y en intención de voto directo siempre hemos estado por encima del 40%. Y luego, en los últimos ocho meses se ha empezado a ver lo que se ha ido fraguando en los primeros tres años. Una cosa es que creyeran que esto iba a buen puerto y otra que la gente visualizara el fin de Pozos Dulces, que el Paseo Fluvial está en obras, que El Puerto, en la costa y en el centro, se llenaba de grúas de nuevo… La gente ha podido palpar que lo que dijimos que íbamos a hacer se ha transformado en hechos objetivos.

Soy bastante prudente al valorar efectos locales a partir de contextos generales porque, de lo contrario, Patricia Cavada o Juan Franco no hubieran sacado mayoría absoluta en San Fernando y La Línea, respectivamente. Afortunadamente, al contrario que en 2019, el partido al que represento a nivel local ha estado en una posición sociométrica bastante distinta. La marca del partido, por el impulso de Juanma, por el impulso de Alberto Núñez Feijóo, tenía más reconocimiento social que aquel año. Pero sí creo que la gente sabe distinguir mucho cuando vota a qué vota. En 2019 perdimos las elecciones europeas que estaban separadas dos centímetros de las elecciones municipales que ganamos nosotros. Hay una diferencia de voto entre lo ideológico y la gestión local. Indudablemente, hay mucha gente que ha descartado, al menos transitoriamente, el modelo del PSOE del todo vale por estar en el poder y ha reunificado el voto en torno al PP del centro derecha. Pero, sin duda alguna, la clave local ha sido decisiva. 

Otra vez en campaña: "Espero que los españoles tengan en consideración cuánto daño ha hecho la política del todo vale por estar en el poder"

Lo primero que yo pienso es en formular un nuevo gobierno. Lo que me toca es pensar en El Puerto. Desde la pasada noche del domingo y hasta el 17 de junio lo que tengo que pensar es cómo hacer un gobierno eficaz, eficiente, al tener ya la amplitud que necesitábamos, y poner a los portuenses en el centro de nuestra acción. Y luego hay una convocatoria anticipada de elecciones generales, en las que evidentemente nos jugamos el futuro como ciudad importante dentro de la Nación. Por supuesto. Espero que los españoles tengan en consideración cuánto daño ha hecho la política del todo vale por estar en el poder, de pactar con cualquiera cualquier cosa por tal de ocupar la Moncloa. 

Por ahora nada. A ver, trabajamos en un nuevo modelo político administrativo del Ayuntamiento de El Puerto. Contratamos hace algunas semanas a una consultora que nos dirige hacia un estatuto de gran población, con el que queremos revolucionar la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) del Ayuntamiento; hacer una nueva estructura administrativa con personal directivo, con nueva capacidad económica. Al adherirnos a la ley de grandes ciudades, tanto en los tributos nacionales como en los tributos autonómicos, veríamos incrementado prácticamente los ingresos en 10 millones de euros y con eso haríamos una nueva composición, ya no sólo política, sino también administrativa del Ayuntamiento. Por tanto, sin prisa pero sin pausa. Lo que queremos es ya plantar la base de lo que nosotros esperamos que en el primer trimestre del año 2024 sea el reconocimiento por parte del Parlamento autonómico del Estatuto de la Ciudad del Puerto. 

Cuando llegamos al Ayuntamiento en el año 2019 sabíamos que nos enfrentábamos a un reto enorme. Un Ayuntamiento que estaba ultraendeudado, un Ayuntamiento que había perdido 150 funcionarios entre 2015 y 2019, y un plan de ajuste que seguía desangrando al Ayuntamiento, porque cada plaza de funcionario que se jubilaba se amortizaba. Sin contratos básicos, como el de mantenimiento urbano y, por lo tanto, sin arreglar lo más básico de la calle. Y tuvimos que tomar una serie de decisiones, como aguantar los contratos en precario hasta arreglar económica y financieramente el Ayuntamiento. Es decir, sanear la deuda y así liberar del capítulo 9, los pasivos financieros, y utilizar esos ingresos para el capítulo 2, que son los gastos de los contratos, y capítulo 1, que son los gastos de personal, para volver a incorporar a funcionarios. El Ayuntamiento ahora mismo está con capacidad de crecimiento tanto en personal como en recursos. La deuda financiera se ha rebajado casi en el 90% y esperamos en el verano acabar con la deuda con la liquidación del ejercicio de 2022, y liberar por completo al Ayuntamiento de las trabas financieras y de la tutela de Hacienda.

"El Ayuntamiento ahora mismo está con capacidad de crecimiento tanto en personal como en recursos"

Era una situación bastante paradójica. Teníamos mucho dinero aquí en las cuentas, 80 o 90 millones, pero en el estado económico financiero, y administrativo, del Ayuntamiento, ese dinero estaba absolutamente bloqueado. ¿Por qué? Porque antes no se hacían las liquidaciones, porque Contabilidad no contabilizaba las facturas, y no se pagaban… Había muchos problemas de solvencia administrativa de los recursos económicos, que no es lo mismo que no tener dinero. En el momento en el que logramos resituar administrativamente el Ayuntamiento, con un nuevo plan de ajuste, con la liquidación, modificando la estructura de las unidades administrativas del Departamento de Contabilidad, con control presupuestario, empezamos a pagar y empezamos a a poder disponer del crédito que el Ayuntamiento tenía y, por tanto, rebajar la deuda. 

Está saneado, está estabilizado, y nos faltan más o menos unos 4 millones de euros de pago de deuda comercial, de facturas, que están con problemas. Y nos faltan más o menos en torno a 12 millones de euros para acabar con la deuda financiera, los préstamos de los planes de pago a proveedores, y en la liquidación vamos a estar en torno a un superávit de 20 millones de euros. Y ese dinero podrá ser usado para mayor dotación de los contratos de servicios públicos básicos, ofertas de empleo público e inversiones que El Puerto necesita.

"En los edificios municipales, ya sean por ejemplo los colegios, el cementerio y demás, el personal operativo no tenga por qué ser funcionario"

Tenemos que ir a un contrato de limpieza de 16,6 millones de euros, no de 12 que es el que tenemos ahora, para que llegue a todos lados y con frecuencia, y con nuevos materiales y equipamiento; y también para dar garantía económica al acuerdo de convenio colectivo que firmaron trabajadores y empresa. Tenemos que ir a un nuevo contrato de mantenimiento de edificios municipales donde vamos a incorporar el cementerio; la plaza de toros; la vigilancia de los parques, para que no se conviertan en un espacio que pueda ser tendente a la delincuencia; la iluminación de los parques públicos… Tenemos que ir a un nuevo contrato que está saliendo en licitación de ayuda a domicilio, un nuevo contrato de autobuses y un nuevo contrato de playas que incorpore el socorrismo para que tengan ese servicio la mayor temporada posible.

Me parece razonable que en los edificios municipales, ya sean por ejemplo, los colegios, el cementerio y demás, el personal operativo no tenga por qué ser funcionario. Aquí no vivimos en Corea del Norte, ni en China. Los barrenderos no son funcionarios, son trabajadores de una contrata del Ayuntamiento que presta servicio público, pero no son funcionarios. Yo creo que como mejor le puede ir al cementerio, como mejor le pueden ir a las instalaciones deportivas… es con personal que está al servicio de contratos del Ayuntamiento. 

Sí, bueno, con concesionarias.

Con respecto al Plan General, estoy muy satisfecho con el trabajo que se ha hecho durante estos años. Todos los gobiernos quisieron aprobar un plan especial de protección del Casco Histórico y nunca se llegó a aprobar aquel Pepryche. Nosotros lo aprobamos con mascarilla, en mitad de la pandemia, de manera provisional y definitiva, y no sin esfuerzo. Y eso ha supuesto una dinamización y una concreción de más de 40 proyectos de rehabilitación del centro histórico.

Con todo eso estamos muy satisfechos, pero también estamos muy satisfechos con la toma de decisiones del Plan General. Nos dieron la noticia desagradable de la caída del PGOU del año 2012 y tomamos la decisión de recurrir, pero mientras preparábamos los estudios previos de un Plan General para no caer directamente al del año 91. Teniendo en cuenta que la Lista (nueva ley del Suelo en Andalucía) se aprobó a finales del año 22, llegamos también con los deberes hechos para incorporarnos como primeros de la lista a El Puerto en la nueva ley, y ya hemos dado cuenta al pleno del avance de ese planeamiento.

Nuevo Plan General: "De los tres modelos de ciudad, el intermedio. Es decir, ni una ciudad ultra expansiva, ni una ciudad reducida"

De los tres modelos de ciudad, el intermedio. Es decir, ni una ciudad ultra expansiva, ni una ciudad reducida, sino una ciudad acorde al desarrollo socioeconómico de El Puerto. Una ciudad que prevé varias coronas de crecimiento tanto residencial como con espacios culturales, nuevas zonas verdes, espacio de crecimiento logístico e industrial, tanto en TecnoBahía como en Las Salinas, mejores conexiones metropolitanas, con la posibilidad incluso de un puente para un tranvía que conecte Cádiz con Sanlúcar por vía de Rota y con Jerez. 

Creemos que El Puerto, en cuanto a la iniciativa privada, está en auge, y no necesita impulso más allá de la capacidad administrativa que tengamos de dar a esos proyectos. Cuanto más licencias y más rápido, mejor, siempre dentro de la norma. Pero evidentemente, el crecimiento de la ciudad y la revalorización de la propiedad en El Puerto conlleva también que haya gente que no tenga acceso a un derecho fundamental como es la vivienda. Y ahí es donde tiene que intervenir en el mercado la administración pública, tal y como yo lo entiendo. ¿Qué pasa? Que nosotros no tenemos recursos financieros para hacer promociones de vivienda pública. Yo creo, y así lo he pedido a todas las instituciones, que debe haber un Plan Nacional de Vivienda y un Plan Andaluz de Vivienda con los que tenemos que compartir los recursos. En definitiva, que las empresas municipales de vivienda y suelo tengan capacidad de recursos económicos para promover viviendas para jóvenes y mayores con dificultades de acceso a la vivienda. Queremos que El Puerto esté al alcance de todos los bolsillos.

Yo hablo de 4.500 unidades habitacionales, que van de la mano de nueva creación, nueva planta, con rehabilitaciones.

"Que el turismo sea nuestro único factor de desarrollo económico no me gusta"

Cuando lleguemos a ese río, cruzaremos ese puente. Aquí no tenemos un problema de turistificación. Aquí tenemos un problema de masificación de una segunda residencia en los meses de verano, pero como ha pasado toda la vida. O incluso en los mejores tiempos. Es decir, julio y agosto. Ahora mismo estamos creando un espacio turístico de 365 días, no sólo un espacio de veraneo de 60. A partir de ahí, que el turismo sea nuestro único factor de desarrollo económico no me gusta. Y no creo que eso esté en sintonía con las posibilidades de El Puerto y su posición estratégica, que no la hemos decidido nosotros, sino la naturaleza. Y beneficiarse de ello no lo decide el político, sino por ejemplo el algoritmo de Amazon, y por eso se ubicó en Las Salinas.

De haber girado el rumbo de El Puerto. Hablaban de El Muerto de Santa María y ahora hay problemas porque los servicios públicos no dan abasto, o de que llegan muchas empresas y no pueden ser contratados todos los portuenses en paro. Ya no es una ciudad en decadencia, es una ciudad en auge. Y ese cambio de rumbo no es producto de una sola decisión, sino de una serie de actuaciones y decisiones en el mandato que han provocado que El Puerto lidere las buenas noticias de la provincia.