La Coral Polifónica Capuchinos, Premio Ciudad de Jerez 2022 a la Creación, galardón que recogerá este viernes 7 de octubre, nació en el otoño de 1988 en el convento de los Padres Capuchinos de Jerez, gracias a un grupo de personas aficionadas a la música coral, de la mano de fray Alberto González Caballero, fundador y primer director. Actualmente la Coral está bajo la dirección de la directora de coro, musicóloga, profesora de canto y musicoterapeuta Marina Guerrero.
Teresa Díez Merchan, presidenta y fundadora, ante el 35 aniversario de su fundación reflexiona diciendo que “la vida es un soplo; parece que fue ayer cuando comenzamos, pese a que el trabajo es inmenso y pesan mucho los 35 años que nos obligan a hacerlo cada vez mejor”.
Es la coralista más veterana. Para ella, el secreto de alcanzar tantos años de existencia del grupo es “la ilusión y transmitirla a los coralistas; todos somos amigos y nos transmitimos esas ganas y afición por el canto coral, desde los componentes hasta la directora”. En pocas palabras, el ‘buen rollo’ “es fundamental en la coral y en cualquier colectivo; no debe haber ningún elemento contaminante”.
Recuerda que los principios “fueron muy bonitos; nosotras mismas nos confeccionamos los uniformes con la ayuda de costureras que eran integrantes del grupo y sobre todo la convivencia entre todos”. “Éramos ocho y después fuimos aumentando poco a poco. Un grupo de amigos unidos por el amor a la música”.
Hace unos días recibió una llamada de la Alcaldía de Jerez comunicándole la concesión del premio a la Creación. “Todavía me tiembla el corazón desde cuando nos comunicaron la concesión del premio. Dije ¡¿cómo!?… la verdad es que me emocioné y aún me dura. Es lo mejor que nos ha podido pasar y nos da fuerzas para seguir adelante, luchando por la cultura, por llevar el nombre de Jerez tanto aquí como afuera”.
Marina Guerrero, directora de la coral, desvela que el secreto de un grupo de canto formado por voluntarios y amantes de la música, se localiza “en la amistad y que los coralistas se lleven el valor añadido del aprendizaje que se le proporciona para alcanzar un resultado estético razonable y que aprendan a cantar”. Viene de Madrid y lleva en Jerez dos años; atesora una larga experiencia en el canto tanto en lo académico como en actuaciones y espectáculos, lo que le lleva insistir en que la cohesión del grupo es importante, “para que todo se traduzca en musicalidad; de lo contrario todo es frío y no hay manera”. Asegura que “todo el mundo puede aprender a cantar; aquí les damos la oportunidad a todas las personas para formar parte de la coral”.
Claudia Cebadera, 11 años, es la componente más joven del grupo. Empezó yendo con su madre a los ensayos pero se sentaba aparte en el local que tiene el grupo en la tercera planta de la casa Capuchina. Se limitaba a pasar el rato con su consola de juegos y apenas prestaba atención a lo que le rodeaba a la espera de que su madre terminara el ensayo. P
asado algún tiempo pidió a su madre sentarse en el coro a su vera hasta que un día la directora la oyó canturrear y le llamó la atención su voz de contralto: “esto es muy divertido porque además te relacionas con todos los mayores y es superguay”. No le importa que sean de mucha más edad que ella, “porque los pillo muy bien”. En claudia, sus cualidades para el canto son innatas; no da clases pero su aprendizaje con la coral es rápido y capta rápidamente las enseñanzas, como señala su propia madre que está encantada con la nueva afición de su hija.
Las numerosas actuaciones de la coral son de la más variada naturaleza; desde actos oficiales a los religiosos en Jerez y la provincia incluso a escala internacional. La Coral Polifónica Capuchinos ha organizando encuentros de corales todos con carácter benéfico. Actualmente se viene presentando como una Agrupación Musical renovada en todos los aspectos.
Asimismo, ha merecido numerosos premios y reconocimientos como en 1996 el primer premio José María Pemán, otorgado por la Orden del Catavino de Oro; en 2013, con motivo del XXV aniversario, el Ayuntamiento de Jerez descubrió una placa en la sede de la coral por su trayectoria; en 2018, los Reyes de España acceden a presidir el Comité de Honor de los actos programados con motivo del XXX Aniversario de la Coral. Y ahora suma el Premio Ciudad de Jerez por la difusión de la música coral y su contribución a la proyección cultural de Jerez.
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