Desvaríos IV

Mundo. Foto de J.C. González

1. Filisteos: Muñecos articulados de un teatrillo balanceando el cuello en un movimiento frontal de inclinación de la cabeza. Tristemente les faltaba el mecanismo que les permitiera girar el cuello en un desplazamiento lateral de negación.

2. Cuando era joven, desvalido, le entusiasmaba la idea, solo la idea, de llevar bastón; necesitaba para vivir un apoyo ortopédico sobre la tierra. Ahora, mayor, paradójicamente más autosuficiente, disfrutaba caminando sin apoyos mecánicos.

 
3. Decía una abuelita nonagenaria: "Se ha perdido la vergüenza, la modestia y el pudor. Solo queda gente frívola en una desenfrenada exhibición".


4. Con la lectura, vía de escape de la vulgaridad, rompió con un mundo uniforme y anodino. Unas veces le conmovía el corazón y otras se lo aliviaba.  Siempre al borde del caos.

 
5. Cuando descubrieron el rango y la relevancia social de aquel hombre, que era un "homme du monde", todos quisieron ser sus amigos. Antes, las personas de escasa monta no les interesaban.

 
6. El sufrimiento erosiona la ternura. ¡Crac! Se quebró como un espejo roto irrecuperable.


7. La soberbia nada hace gratis. Aprovecha todos los resquicios, no deja ni uno, para saciar sus intereses y su ego.

8. Es más difícil respetar las ideas contrarias que reafirmarse en las propias. Pero no lo olvides nunca, delante de las ideas hay personas.

9. Ella no era bonita, pero tenía algo que enamoraba: su saber estar, su elegancia, su bondad. Es la distinción la que hace atractiva y cautivadora a una persona. 

10. Sus ojos me observaban, pero no sé si me veían. Tenía una extraña mirada que más parecía escudriñar hacia dentro que hacia fuera.


11. Las personas sinceras, sobrias, se expresan con la precisión y el cuidado que requiere cada momento; nunca hablan por hablar.

 
12. Algunas personas tienen grabadas en su mente la escena, el momento y las personas, en que se destruyó su inocencia para siempre.

 
13. ¡Si pudiéramos recobrar las emociones pretéritas, alegres o tristes, que han dejado su huella en cada arruga!

14. Anomalías psíquicas o heridas de la vida. Perdición: Acción de perderse. Ruina espiritual.

 
15. Es difícil encontrar rastros personales en tiempos tecnológicos; historias humanas entre tanta soledad. Tambores de guerra.

16. Por eso, un hombre había elegido para sí una extraña reciedumbre ante "la Invasión de la Máquina" y una pizca de ternura entre los humanos que aún quedaban.

 
17. Aquel hombre se quedó dormido, cubriéndose la cabeza, temeroso de que se la robasen.

 
18. Escribía poesías en las redes sociales. Unas eran propias, otras robadas. Eran oráculos en tiempos de incertidumbre.

 
19. Hay dos móviles en las personas: los intereses y las actitudes. Aunque suelen combinarse, a veces los intereses se disfrazan de generosidad y en otras ocasiones las actitudes de rebelan contra la ingratitud.


20. Dos son los movimientos básicos de la vida del hombre: desenvolvimiento en el mundo y repliegue espiritual en el alma; con sus reversos: dispersión en el ruido y embrutecimiento del ser.