Aqualia, la multinacional que gestiona el agua de nuestro municipio, es hoy noticia. El actual gobierno local, también.
Aqualia, la multinacional que gestiona el agua de nuestro municipio, es hoy noticia. El actual gobierno local, también. Quién lo ha visto y quién lo ve. Hace poco más de un año, antes de acceder al Ayuntamiento de Jerez, el PSOE se animaba a participar en las reivindicaciones de los movimientos sociales y políticos en contra de la privatización de este servicio público. En ocasiones es necesario revisar la hemeroteca para desenmascarar la hipocresía que lamentablemente esconde el actual gobierno local y la entonces oposición. Imagino, pues, que las declaraciones que hizo el número 4 en las listas del Partido Socialista a las elecciones municipales, José Antonio Díaz —hoy teniente de Alcaldesa de Movilidad, Medio Ambiente, Infraestructura y Participación—, prometiendo un “marcaje férreo” a Aqualia, era sólo fruto de la precampaña electoral. Y que a este respecto, los compromisos contraídos con Ganemos Jerez e Izquierda Unida tras el pacto de investidura, son papel mojado.
En la disyuntiva entre agua pública y agua privada, al menos, no puede ser de otra forma. El actual equipo de gobierno del Ayuntamiento de Jerez no sólo no está cumpliendo con el Pacto Social por el Agua que se aprobó en el pleno ordinario del pasado mes de septiembre, sino que hace deméritos, poniendo trabas a los acuerdos acaecidos, por ejemplo, en torno a la Mesa de Seguimiento del Agua, el Suministro Mínimo Vital o el propio servicio técnico municipal, ente que debería revisar las condiciones del contrato con Aqualia.
IWA son las siglas de Internacional Water Association, una de las entidades organizadoras del congreso denominado como IWA Leading Edge Conference, que reúne en Jerez desde hoy y hasta el viernes a expertos y ponentes en tratamiento y gestión del agua. Los organizadores apuntan, en esta línea, que la décimo tercera edición de este congreso internacional incidirá en los retos y desafíos que presenta en la actualidad el ciclo integral del agua, junto con la innovación, la contaminación o la escasez. Me pregunto qué criterio va a seguir en sus resoluciones sobre temas como la escasez o la contaminación un congreso organizado por las multinacionales del agua y sus socios a escala internacional. Este servicio, reconocido por la ONU como derecho humano y que debería ser público y universal, es hoy objeto del más ruin mercadeo y de la especulación a lo largo y ancho del mundo. En Jerez no iba a ser menos. Con el patrocinio del Ayuntamiento, el grupo Aqualia-FCC ha señalado a Jerez en el mapa y nos ha elegido como sede en esta cumbre internacional. Hoy, el gobierno local, formado por los mismos que hace un año condenaban la privatización del servicio a Aqualia, se vanagloria de ello.
Mientras, en la calle, con la gente y en defensa del agua como servicio público, la Coordinadora del Agua de Jerez ha organizado unas jornadas que contraprograman a las convocadas por el IWA. Bajo el lema Unidos por el Agua, este colectivo, creado antes de la privatización del agua en Jerez y que continúa dando guerra a día de hoy, nos convoca este martes 14 y miércoles 15 a una serie de ponencias, mesas redondas y concentraciones en pos de los retos a los que se enfrenta la gestión del agua y su ciclo integral pero, cabe remarcarlo, como servicio público. En esta línea, no podemos dejar de obviar, inmersos en esta vorágine neoliberal a nivel global, que el agua se ha convertido en un producto más y que, los que creemos que otro mundo es posible, no comprendemos cómo se puede hacer negocio con un bien de primera necesidad. Otros, sin embargo, donde dijeron agua, dicen IWA.
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