Donde hay una necesidad sí hay un derecho

No hay un orden natural que establece que haya ricos y pobres, y que los pobres deban sufrir toda su existencia, pasar hambre y necesidad

Ayuso, colocando la Medalla Internacional de Madrid a Milei.

¿Podemos ser todos ricos? No, es imposible. Incluso Milei, entre todas sus pamplinas y otras necedades, afirma que las necesidades son infinitas y los recursos finitos. Pensemos en esto, y en que esto sirva como argumento para afirmar la aberrante barbaridad de que la justicia social sea aberrante. No.

Si los recursos son finitos este capitalismo, y el capitalismo neoliberal, son la aberración. La mina de Cáceres destruirá la región y luego no podrá repararse. ¿Para qué tanta destrucción? ¿Para ir en coche de litio? Cuesta menos irse en el tren, después de haberlo construido y pagado. Lo mismo para la Bahía y para tantos lugares de este mundo. ‘Es que yo quiero ir en mi coche y ser libre de ir y venir cuando me dé la gana y no tener que sujetarme a los horarios’. Entonces viene un listo a decir que las necesidades no pueden ser derechos si se trata de comer, de tener un techo sobre el pelo y una médica contra la enfermedad. Pero la pretendida necesidad de libertad de ir en mi auto cuando me dé la gana se convierte en un derecho. Y sí. Patricia Bullrich, ministra de Seguridad de Milei publicó un protocolo para limitar el derecho de libre manifestación y que los que protestan vayan por las aceras para que los que van en auto no vean limitado y derecho a ir en auto. El que protesta porque no come, derecho garantizado en todo régimen democrático debe quedar limitado por el presunto derecho a ir en auto. Estamos hablando de que el 60% de la sociedad argentina está en la pobreza, según datos oficiales. Pero claro, Argentina a muchos les queda lejos: Europa es la perla del mundo. ¿Se dieron cuenta de cuánta gente habita en las calles en la maravillosa Europa?

Resumen: hay necesidades que pueden ser derechos y hay necesidades que no lo pueden ser. ¿Qué es una necesidad? ¿Puede ser que el 60% de la población de un país sea pobre y lo sea porque le da la gana, porque no trabaja, porque treinta millones de personas son flojas y haraganas, y no quieren trabajar? Estos son los mismos argumentos que usa Abascal, Ayuso, Feijóo, etc., que se deshacen en elogios a un Milei cuya economía, según datos oficiales del FMI, va a decrecer un 3,5% y España, con un gobierno de izquierdas, crecerá un 2,4%.

FMI, datos oficiales. Crecimiento económico 2024:

Argentina -3,5%

España + 2,4%

“Something is rotten in the state of Argentina”. Algo huele a muerto en el neoliberalismo ultraderechista de Vox, PP y La Libertad Avanza, serían las palabras de Shakespeare si pudiera ver lo que desde Argentina le anuncia al mundo en la voz de un iluminado que habla con su perro muerto. Las lágrimas de un tipo que se emociona ante la imagen de sí mismo cuando ve su rostro pintado en un cuadro propio de un escolar aprendiz sin grandes dotes para la pintura. ¿A qué punto llegó la cosa en la Argentina? Alto. ¿En Argentina? No, para nada. ¿No estamos viendo lo que ocurre en Europa, en USA?

La infoxicación nos reduce la imagen de Argentina y convierte a ese país maravilloso de personas maravillosas en un resumen grosero simbolizado por Milei y sus timberos, a los mandos de la economía del país, y la seguridad al servicio de la dictadura neoliberal de una ministra procaz e igualmente muy fantasiosa, dedicada a criminalizar la protesta hasta el punto de ordenar la cacería de personas por las calles de Buenos Aires para dar un escarmiento. 30 detenidos, de los que quedan 5 en prisión, en un penal de alta seguridad, todavía sin juicio, con todas las irregularidades imaginables, hasta el punto de que el Alto Comisariado para los Derechos Humanos de la ONU ha expresado su seria preocupación.

No deberíamos escondernos de nuestra categoría humana haciendo que no vemos ni sabemos lo que ocurre. No hay un orden natural que establece que haya ricos y pobres, y que los pobres deban sufrir toda su existencia, pasar hambre y necesidad. La solidaridad es lo que al ser humano lo hace humano, y la pobreza es el resultado de la avaricia de unos pocos y del deseo de avaricia de otros muchos.

Díaz Ayuso acaba de imponer una condecoración de chapa dorada de chorizo a un sujeto que anuncia una ley para el comercio libre de órganos humanos, un tipo que afirma que es legítimo vender a los propios hijos y que tiene una ministra de Seguridad muy locuaz y preocupada por las manifestaciones contra su Gobierno, pero no dice ni mu sobre la desaparición del niño Loan en Corrientes, Argentina, con varios detenidos ya y la creciente sospecha de que haya podido ser secuestrado para una posible trata o venta de sus órganos. Parece tan increíble que hay personas que afirman que eso no es posible. Así lo votó a Milei un aproximado 40% de la sociedad argentina.

Existen las necesidades para la vida humana: el alimento, la vivienda, la salud y la educación. Luego están los caprichos de niño malcriado. El derecho a la vida, que no se puede ir defendiendo al mismo tiempo que la pena de muerte.

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