"Histórico" es uno de esos adjetivos de los que suelen abusar tanto los políticos como los medios de comunicación, pero hay ocasiones –solo ocasiones– en que dicho calificativo se corresponde fielmente con la realidad. En un panorama de gran incertidumbre política y económica a nivel mundial, con la inflación desbocada, un conflicto bélico en Europa que se prolonga desde hace año y medio y una amenaza de recesión pronosticada por buena parte de organismos internacionales, España ha conseguido cerrar el primer semestre de 2023 con unos buenos datos en lo que se refiere a la creación de empleo y la afiliación a la Seguridad Social.
Es difícil calificar de otra forma los dos hitos que se han dado a conocer, como son superar, por primera vez en la historia, los 21 millones de trabajadores afiliados a la Seguridad Social (datos del Instituto Nacional de Estadística) y la creación de 604.000 empleos (brutos) en un tiempo récord, ya que estamos hablando de esa diferencia entre el segundo trimestre (cierre del primer semestre, en consecuencia, que se ha dado a conocer) y los datos a 31 de marzo (primer trimestre). En línea con estos datos, la tasa de paro se sitúa en el 11,6% y son unas 365.000 personas las que han abandonado en España las listas de los distintos servicios de empleo de las comunidades autónomas durante este período.
Es curioso resaltar que la ministra de Industria y vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, prácticamente clavara estos datos en una intervención pública de hace dos meses, si bien es cierto que la manera en que actualmente se contabiliza –por ejemplo, los fijos discontinuos ya no se consideran desempleados durante el tiempo en que no están trabajando– ha sido objeto de crítica recurrente por parte del PP durante la anterior legislatura.
Los datos de Andalucía, hay que decirlo ya, no son tan buenos como los del resto de España y debería llevar a una reflexión a la Junta. De esos 365.000 parados menos, solo unos 1.300 corresponden a la comunidad autónoma. Además, la tasa de desempleo sigue muy alta, en el 18%, un porcentaje que contrasta poderosamente con el mencionado 11,6% nacional, una cifra que solo superan Ceuta y Melilla. Andalucía solo crea empleo neto en el sector servicios –estamos en plena temporada veraniega– y la construcción, y lo pierde en agricultura e industria. El presidente andaluz, Juanma Moreno, ha expresado la necesidad de que haya "acciones urgentes" por parte del Estado, sobre todo en el sector primario, ya que estima que se están evidenciando los efectos negativos de la sequía en la agricultura, un sector vital en la economía andaluza, lo que incluso podría llevar al Producto Interior Bruto (PIB) autonómico al terreno negativo.
Comentarios