Fumata blanca sobre el futuro del Parque Nacional de Doñana. "Acuerdo histórico" entre el Gobierno central y la Junta de Andalucía que cuenta con el beneplácito de los agricultores interesados e incluso de la propia Estación Biológica de Doñana. Haciendo un juego de palabras, al final va a haber 'regadío', pero de dinero. Y el dinero, como decía una vieja canción, lo cambia todo. Está previsto que entre la Administración central y autonómica, e incluso la Diputación Provincial de Huelva, se pongan unos 1.400 millones de euros por distintos conceptos y en cinco años. Este acuerdo hace que decaiga automáticamente el proyecto de ley de regadíos impulsado por el PP y Vox que hubiera regularizado las más de 700 hectáreas que actualmente se nutren de agua procedente del parque nacional de manera irregular.
Los agricultores a los que afecta el plan podrán recibir en dicho plazo hasta 100.000 euros por hectárea, siempre que cumplan determinadas condiciones, la principal es el abandono del cultivo de frutos rojos –fresa y similares–, responsable del estrés hídrico que lleva años soportando el parque, situación agravada en los últimos años por la sequía. Así, pueden optar por el 'desenganche' del uso agrícola, bien dejando que el terreno vuelva a su estado original, bien mediante reforestación, o manteniendo la actividad agraria en secano o en ecológico.
A efectos del plan, Doñana pasa a ser un parque nacional más pluriprovincial que nunca, ya que además de los municipios de Huelva directamente afectados, se incluyen ayudas para Sanlúcar de Barrameda, en Cádiz, y para otros cinco pueblos de Sevilla.
El acuerdo ha sido suscrito por el presidente de la Junta, Juanma Moreno, y la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera. Si Moreno ha enfatizado que se trata de un "acuerdo histórico" en el que "todos ganan y nadie pierde", Ribera, por su parte, ha hablado de que no habrá vetos, pero tampoco amnistías, en referencia a que todos los agricultores podrán beneficiarse de las ayudas, pero que el acuerdo no significa que decaigan las causas abiertas por el uso ilegal del agua.
El de Doñana es un tema que ha tenido distintas derivadas políticas desde que el PP anunció la regularización de estos regadíos. En primer lugar, dicha apuesta ayudó a los populares a recuperar muchos años después la Diputación de Huelva. Después, el PSOE de Pedro Sánchez hizo bandera de la preservación del parque en su campaña a nivel nacional, sumándose a voces como la Unesco e incluso la Unión Europea, que ya habían advertido del deterioro del parque. Moreno ha mantenido nervios de acero y ha conseguido un buen acuerdo para sus intereses, aunque se evidencia que, en efecto, el parque estaba en peligro y el cultivo de frutos rojos tampoco eran tan prioritario para el desarrollo de la comarca...
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