Andalucía se ha llevado un 10 en lo que se refiere a las banderas negras en las playas de su litoral, 10 de las 48 que Ecologistas en Acción 'ha concedido' en toda España. Las banderas negras son el auténtico contrapunto de las 'oficiales' banderas azules, pero solo son un símbolo, sin más. Si estas últimas se lucen con orgullo por los ayuntamientos premiados por lo que supone de reconocimiento a su limpieza y servicios de las playas, las banderas negras –que es obvio decir que denuncian sobre todo problemas de salubridad– suelen ser objeto de debate, cuando no abiertamente de negación por parte de los destinatarios.
De las diez banderas negras que Ecologistas ha otorgado a Andalucía, dos corresponden a la provincia de Cádiz, aunque en realidad podrían ser más, de haberse producido un desglose. Se trata del arenal de Tarifa –por urbanización– y la zona costera de Trafalgar (municipios de Barbate), donde se han detectado tres amenazas, que aquí sí aparecen pormenorizadas por los ecologistas. Se trata del proyecto de bar-restaurante en el faro, por lo que podría significar para el tómbolo y el sistema dunar, además de la privatización temporal del enclave debido a la concesión de la licencia necesaria para su adaptación y explotación; "la extracción ilegal de agua", según denuncian, en el club de polo de Trafalgar-Melgarejo y todo lo relacionado con la urbanización descontrolada en la playa de El Palmar (Vejer).
Es llamativo que Ecologistas en Acción incida tanto en la (mala y desmesurada) urbanización como en la contaminación, cuando hace años este segundo factor era claramente el predominante. Con todo, ahí queda esa referencia a "la contaminación" en esa zona costera de la costa gaditana, ese paraíso de laxa aplicación de la ley que durante tantos años han sido los kilómetros que van de El Palmar a Caños de Meca.
Estas banderas negras no obligan a nada y, de hecho, suelen ser negadas por la administración pública implicada, bien sea ayuntamientos y gobiernos autonómicos, pero no deja de ser un toque de atención, sobre todo en los preliminares de la campaña turística de 'sol y playa' en una comunidad como la andaluza.