Indignarse por la ocupación y solidarizarse con un mercenario que desocupa violentamente es raro si no muestras los mismos nervios por estas cosas que voy a exponerte:
Inventan tipos de interés y cláusulas abusivas desde un banco que encarecen la adquisición de un derecho fundamental para un ser humano. Mientras no son eliminadas, si se eliminan, las ganancias son millonarias. Recuerda, incluso el rescate bancario que regaló la derecha a estas empresas que llevando el libre mercado y sus riesgos por bandera nunca pierden.
Ves cómo desde un Gobierno, por cierto, éste es de izquierdas, no se corrige nada hasta que los casos no los tumben en Europa y te puede el dogmatismo. Existe la posibilidad, desde un Decreto ley, de revertir estas situaciones. Un caso parecido pasa con los indultos de Cataluña, que por el consenso, visión de Estado, paz social y arreglar las cosas desde la política o el Ejecutivo se adelantan a los jueces. O contradicen sus decisiones. Me pregunto si el derecho asequible de un piso y eliminar la usura no facilita la paz social y evita la polarización. Me lo pregunto.
Se dan casos de stock de miles de viviendas que están vacías a la espera de que su precio suba. Para repetir el ciclo de la especulación. Ya deberías saber cómo terminó todo. No se suben los impuestos a los bancos, contundentemente, por esas viviendas vacías. Pero no saltas en el sofá ni se te remueve el estómago. Si un inquilino tiene tres pisos te prima más su derecho a la propiedad que a un joven le resulte una odisea adquirir una vivienda.
Por consenso, paz social, visión de Estado y evitar la polarización se va a indultar a los políticos catalanes presos en un Consejo de Ministros. Me pregunto si el tema de la vivienda no puede arreglarse, desde un Gobierno progresista, desde el mismo sitio: un Consejo de Ministros. ¿Eso no da alas a la ruptura de la izquierda y a la aparición de nacionalismos e identidades que prometen arreglar el problema? De eso a Teruel existe hay cinco minutos.
¿Por qué aquí se delega en los jueces, salvo en ciertas reformas que no arreglan de fondo la situación, y en otros aspectos de la vida sí? La vivienda es un problema político.
Evidentemente soy consciente de que contextualizar es imprescindible para no caer en el populismo más barato, pero aún así dejo esa reflexión. No quiero mezclar cosas pero ver cómo se anima a un matón de rasgos ultras que segrega endorfinas por desocupar a alguien, queriendo ejercer de policía, despotricando en las redes, me parece sospechoso. Otro día podríamos hablar de la destrucción de las ciudades más bonitas y de sus barrios porque las empresas de pisos turísticos quieren ser sur dueñas. Es un tema complicado, pero todo se puede debatir.
Defendemos sus causas y no las nuestras y queriendo matizar diré que no veo la ocupación como una gracia ni como algo positivo, sólo quiero señalar el énfasis y el desconocimiento de lo que la banca hace con este país sin que, al parecer, pueda ser controlada por nadie mientras con cara de bóvidos nos la cuelan desde las emociones.