Hay dos sagas que pertenecen a la literatura fantástica que a mí me hacen evadirme de tal manera, que cuando vuelvo a ellas parece que no hay otra cosa mejor que hacer. En esas sagas se dicen dos frases que aparecen en mi mente cuando veo a José María Aznar en la última Convención Nacional del Partido Popular.
En una de esas sagas, se afirma con miedo y pánico, por parte de un ministro de magia: "Ha regresado". En la otra, un mago viejo y gris les increpa a unos pequeños enanos ante el peligro inminente que les acaecía: "¡Corred insensatos!".
La correlación de esas dos expresiones se entrelazan en mis pensamientos cuando lo observo, ahí sentado, ya sin bigote y más viejo, apareciendo como un héroe, en ese último baño de aplausos organizado por el Partido Popular —"ha regresado, ¡corred insensatos!"—.
Los LGBTIQ+ lo conocemos bien, a él y a toda su familia, más concretamente a su esposa, la de las manzanas y las peras… Y aunque a los ciudadanos de a pie no se nos ha olvidado que fue quien nos introdujo en una guerra, tan sólo por que quiso hacerse una fotografía con George Bush, que se creyó el amo del puto mundo, a todo el Partido Popular sí, y lo nombran su superhombre mientras que se propinan golpes en el pecho hablando de la España de los balcones, y a continuación emerge la imagen de un paisano mío: Juan José Cortés.
Ante mi sorpresa nos ofrece un discurso político donde nos apunta: “Julen, desde el pozo tan oscuro donde estás metido, el PP y España entera está contigo”, ante tal afirmación, a mí tan sólo me nace expresarte que, yo, querido paisano, soy de izquierdas y siento al igual que tú lo que le ha ocurrido a Julen, al igual que sentí lo que le ocurrió a tú hija. No como tú o tú familia, eso ya lo sé. Las vivencias son para vivirlas, una persona no sabe lo que se siente hasta que no lo padece. No obstante, no creo que sea lo más conveniente, hablar de casos concretos y tan dolorosos para realizar mítines políticos, y ante todo para seguir captando votos.
Nombrarlo, como mínimo, fue muy desafortunado, ahora observo lo que se habla de ti en las redes, y desgraciadamente serás tratado por un héroe por algunos y por un villano para otros muchos. Ya tus palabras tan sólo les llegarán a los votantes del Partido Popular. Y entiendo, créeme, cuando te digo que entiendo que si consideras que sólo hay un partido político que puede ayudarte en lo que tú crees, te afilies a él y lo defiendas, pero utilizar desgracias concretas con un caso tan agonizante no debería de ser utilizado para hacer política, por respeto, como mínimo, a su familia.
¿Todo se puede utilizar para hacer política? Estas cuestiones me acribillan ¿Todo tiene un precio? Lo que me ha ido mostrando la vida es que sí, que todes poseemos una estimación, que todo puede ser comprado por un módico importe… Un vientre de alquiler, eso por ejemplo, para buena parte de la población se puede pagar, al parecer podemos adquirir cualquier cosa a través de un contrato. Si esto es así ¿qué tipo de sociedad estamos construyendo si a todo le podemos poner un precio?, una sociedad de consumo se termina convirtiéndose en una sociedad sin escrúpulos, donde en el centro no se encuentran las personas, si no los intereses de cada uno.
Que ser valiente no salga tan caro, que ser cobarde no merezca la pena.
Ha regresado, ¡corred insensatos!